La Brigada de Extranjería y Documentación de la Jefatura Superior de Policía de Extremadura ha detenido a un ciudadano portugués de 57 años como presunto autor de un delito contra los derechos de los trabajadores, agresión sexual y detención ilegal a una mujer brasileña, con la que contactó por internet. Según informó hoy la Delegación del Gobierno en una nota remitida a Efe, esta persona fue detenida el pasado 5 de abril después de que el pasado lunes, 3 de abril, una ciudadana brasileña denunciase que había sido retenida y recluida contra su voluntad durante varios días en un domicilio de la calle Jacobo Rodríguez Pereira, de Badajoz, durante los que fue agredida sexualmente. Las investigaciones policiales determinaron que el ciudadano portugués había insertado en internet un anuncio en el que solicitaba mantener contactos con chicas jóvenes, preferentemente de origen brasileño, a través del que se puso en contacto con él la mujer. Tras varios meses de relación a través de internet y del teléfono, el individuo consiguió convencer a la víctima de que viajara desde Brasil a Portugal, mandándole por fax una carta de invitación y pagándole el viaje hasta Lisboa, desde donde la trasladó en su vehículo a Badajoz, donde la confinó. La denunciante señala que durante este encierro fue sometida a todo tipo de tratos vejatorios y degradantes por parte de su anfitrión, que llegó a agredirla sexualmente, amenazándola con que no volvería a ver a su familia si no accedía a sus demandas. Tras la denuncia, la Policía comprobó que ésta no era la primera vez que el detenido utilizaba este sistema para traerse a chicas brasileñas hasta España, donde las encerraba en alguno de los domicilios que tenía alquilado en Badajoz. También se comprobó que éste había buscado alguna vez chicas brasileñas para otros compatriotas suyos utilizando este mismo sistema. Durante la operación se intervino un ordenador portátil, propiedad del detenido en el cual tenía almacenada multitud de información sobre mujeres, todas ellas brasileñas, con fotografías y otros datos, y se determinó que había más mujeres en la misma situación que la denunciante.