Diez personas han fallecido este año en Extremadura en accidente laboral. El último se registró el viernes en la empresa piensos Teca de Trujillo (Cáceres).

A las puertas de la Asamblea de Extremadura diputados y sindicalistas han guardado esta mañana un minuto de silencio en memoria de la última víctima.

Este trabajador murió por la explosión de una caldera mientras desarrollaba tareas de soldadura, ha indicado UGT FICA, en el que ha recordado que hoy ha habido un nuevo accidente laboral grave en un matadero de Valencia de Alcántara (Cáceres).

En el minuto de silencio ha participado el secretario general de UGT FICA Extremadura, Miguel Talavera, que ha aclarado que los accidentes "no son consecuencia nunca de la mala fortuna, sino del incumplimiento de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales".

A su juicio, "el marco legal es suficientemente garantista en España para salvaguardar la seguridad y salud de los trabajadores, lo que sucede es que de forma sistemática las empresas lo incumplen".

Los accidentes laborales son una lacra que se ha agravado en los últimos años como consecuencia de la precarización del mercado laboral, ha subrayado.

"De modo que los trabajadores no sólo han visto reducidos hasta niveles vergonzantes su poder adquisitivo -ha advertido Talavera-, sino que las prolongaciones involuntarias de jornada, excesivos ritmos de trabajo e deficientes medidas de prevención forman un coctel que provoca dramáticas consecuencias".

Talavera ha exigido un mayor compromiso por parte de las administraciones para que utilicen todos los resortes para hacer cumplir de forma eficaz la normativa en materia de salud laboral.

También ha puesto de relieve que con demasiada frecuencia se producen accidentes graves o fallecimiento de trabajadores de empresas adjudicatarias de las administraciones, lo que ha calificado de "intolerable", porque se han de articular mecanismos para que en ellas se cumpla la normativa en prevención de riesgos laborales.