Además del 47,1% de los hogares extremeños con todos sus miembros ocupados y del 6,8% en que todos están parados, hay otro 15,4% de familias que combinan los desempleados y empleados, y otro 30,9% en que todos son inactivos (jubilados, principalmente). Según el estudio de Caixa Catalunya Vulnerabilidad y fortaleza económica de los hogares , Extremadura presenta una media de un ocupado por hogar, frente a los 0,8 del año 1994. Sólo supera a Asturias en este dato, mientras que en lo alto de la tabla se sitúan Madrid y Baleares, con 1,3 y 1,2 ocupados de media por hogar, respectivamente.

El estudio hace mención también a la evolución que ha seguido el destino del ahorro de los españoles desde el año 1994. En un primer momento, ante la bajada de tipos de interés, los recursos se trasladaron en masa desde los lugares tradicionales (cuentas corrientes e imposiciones a plazo fijo) hasta la inversión en bolsa. Pero a finales de la pasada década comenzó la crisis bursátil que hoy aún perdura y que ha hecho retornar los dineros de los inversores a refugios seguros y de elevada rentabilidad. La inversión inmobiliaria garantiza en poco tiempo importantes plusvalías.