El director de la Central Nuclear de Almaraz, José María Bernaldo de Quirós, indicó hoy que sería un "orgullo" poder tributar en la región si finalmente la instalación se constituyera en Sociedad Anónima.

"Se nos sale de nuestro ámbito --la constitución en S.A.-- pero si finalmente esa es la situación pues nosotros encantados de ser Sociedad Anónima y como tal cotizar la parte correspondiente en Extremadura, sería un orgullo, por cierto", aseguró Bernaldo de Quirós en una entrevista a Canal Extremadura Radio recogida por Europa Press.

Así aseguró que el cambio de comunidad de propietarios, figura jurídica actual, a S.A. es un asunto que está "en discusión" entre el Gobierno y las compañías propietarias y añadió que las centrales nucleares, salvo Santa María de Garoña, no son sociedades anónimas sino "agrupaciones de interés económico que no venden lo que producen ni cotizan en bolsa".

El director de la planta apuntó que esperaban "con impaciencia" esta renovación aunque dijo que estaban convencidos de que estaban "preparados" para ello, como ya había avalado el Consejo de Seguridad Nuclear en un informe previo.

Al respecto se mostró "muy contento" porque con esta autorización de funcionamiento hasta 2020 "se da una carta de naturaleza al buen trabajo que venimos realizando y al muchísimo dinero en inversiones que hemos puesto en esta planta para garantizarles el futuro".

Preguntado por si con la renovación de la explotación se acabará con el debate sobre su continuidad o el riesgo de la instalación cacereña, Bernaldo de Quirós dijo que da por delante "muchos años de funcionamiento, de futuro y de preparar la próxima renovación".

"Debate siempre habrá; la energía nuclear es controvertida pero cada vez la aceptación de este tipo de energía por parte de todo el mundo es muchísimo mayor y se está consiguiendo difundir y llegar a la opinión pública mucho más, explicar mejor las cosas y que la gente considere este tipo de energía como una más; polémica siempre habrá pero esto nos despeja el camino ampliamente", indicó.

La autorización del Ministerio de Industria para funcionar durante diez años más, según el director, era "casi de oficio" pero añadió que la siguiente tendrá lugar en un "ámbito distinto" ya que una de las unidades la instalación pasaría de los 40 años de vida.

"Hoy lo que me toca es disfrutar lo que tenemos y trabajar para seguir haciéndolo bien y que esta instalación funcione de manera segura, fiable y productiva para este país y para Extremadura", dijo.

Sobre las compensaciones a Extremadura con motivo de la prolongación del funcionamiento de la planta, Bernaldo de Quirós hizo alusión al establecimiento para este ejercicio, por parte del Gobierno regional, de una "nueva tasa" del impuesto "ecológico" a las eléctricas que significa una cantidad de 60 millones de euros anuales, lo que equivale a la cifra de 600 millones de euros que estimó inicialmente la Junta como contrapartida.