"La discapacidad somos, estamos y contamos". Alfonso Cortés, gerente del Comité de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) en Extremadura, cerró con estas palabras el acto celebrado ayer en Mérida en que este colectivo reiteró, como el año pasado, su grito de SOS Discapacidad . "Tenemos que denunciar los recortes y retrasos que está sufriendo esta población", manifestó el presidente del CERMI, Manuel González, que reclamó un pacto sostenible de atención.

Dicho acuerdo debería regular "un sistema coherente de servicios concertados que puedan crear un modelo estable para las personas con discapacidad", según González, que indicó que los logros sociales obtenidos hasta ahora "han sido gracias a la acción sistemática y el buen trabajo de las asociaciones". Por ello, reclamó que se ayude económicamente al sostenimiento de ese movimiento asociativo.

El presidente del CERMI repasó muchas de las cuestiones en las que actualmente aún existen dificultades para los discapacitados, como la falta de accesibilidad y el acceso al empleo. Sobre este tema, indicó que "las personas con discapacidad están sufriendo más esa falta de creación de empleo" y apuntó que la falta de ayudas públicas pone en riesgo miles de puestos, como los de los centros especiales.

Asimismo, recordó la necesidad de que la inclusión real del alumnado con discapacidad en los centros educativos "vaya más allá de una mera declaración sin traducción práctica ni contenido efectivo en la mayor parte de las ocasiones". Por otro lado, abogó por el aumento del diálogo entre la administración y el tercer sector, es decir, las entidades representativas de los más desfavorecidos. Y puso el acento en la especial exclusión de las mujeres y niñas con discapacidad y de los discapacitados que viven en el medio rural.

En el acto, también participaron las representantes de las organizaciones del CERMI Fedapas (deficientes auditivos) y Cocemfe Cáceres (discapacidad física y orgánica). "Cada recorte es una pérdida de derechos", sentenció Cortés.