Tres personas detenidas y siete denuncias por imprudencia es el resultado de las acciones de vigilancia llevadas a cabo por la Guardia Civil en sólo un mes.

Las dos últimas detenciones --M.T.T. y L.T.S.-- como presuntos autores de un delito de incendio forestal por quemar rastrojos sin extremar las medidas de seguridad se realizaron por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) en Talaveruela el día 28 y en Losar de la Vera el lunes.

Sobre estas detenciones y sobre las medidas que se van a adoptar en el futuro para luchar contra los incendios forestales se habló en la reunión que mantuvieron ayer en la Subdelegación del Gobierno de Cáceres el consejero de Desarrollo Rural, Francisco Javier López Iniesta; el teniente coronel de la Guardia Civil, Luis Iglesias; y la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira.

Allí se acordó mantener una serie de reuniones durante el mes de febrero en las que se pretende diseñar la colaboración de las administraciones con los fiscales contra incendios, redactar el Plan Infoex y desarrollar un plan de formación para el personal de la Junta en investigación de incendios. Sin embargo, lo más perentorio es acabar con el elevado número de incendios provocados en la región por la quema de pastos, en una situación de riesgo como la actual, debido a la sequía prolongada que existe en la comunidad.

270 INCENDIOS Sólo en lo que va de año, en Extremadura se han producido un total de 270 incendios, un 90% de ellos en la provincia de Cáceres, que han arrasado 600 hectáreas. Una cantidad alta que esperan se frene gracias a la colaboración que están mostrando los ciudadanos de zonas donde, normalmente, se realizan quema de rastrojos. En este sentido, el consejero de desarrollo Rural, López Iniesta, manifestó que se está perfilado un plan de quema controlada, que por el momento no se puede llevar a cabo por las circunstancias climatológicas adversas, pero que se ejecutará en cuanto sea posible, a la vez que pidió, especialmente a los ganaderos y pastores, su apoyo.