"Buenos días. Aquí estamos ocho sin papeles". Esas fueron las primeras palabras que pronunció el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, cuando llegó poco después de las 14.00 horas de ayer en compañía de la ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, al último control que el Grupo Placentino de Montaña tenía ubicado en el paraje jarandillano de San Francisco. El fin era saber al final de la jornada si los casi mil caminantes que recorrieron la Ruta de Carlos V, entre Tornavacas y Jarandilla, llegaban a su destino. Los ministros y sus acompañantes no estaban inscritos en el listado general de la travesía por razones de seguridad.

Previamente, EL PERIODICO había abordado a ambos ministros en pleno campo, en la zona de La Serradilla, donde aseguraron en un día espléndido de sol que "es una ruta muy bonita".

Un veterano de la ruta

En este sentido, Caldera insistió "en que es una ruta preciosa en cualquier época del año", declarándose "un veterano" de la misma. "La he hecho en otras tres ocasiones. La última el verano pasado". En cambio Elena Salgado, titular de Sanidad y Consumo, era la primera vez que se enfrentaba a los veinticinco kilómetros que recorrió Carlos V el día 12 de noviembre de 1556, antes de alojarse en el castillo de Jarandilla.

Por otra parte, la ministra Salgado apuntó, como no podía ser de otra manera, que "además este recorrido es buenísimo para la salud, lo que ocurre es que para hacerlo no se debe fumar".

A Caldera además le sirve "para desconectar de la faena diaria y disfrutar plenamente del domingo".

El primer montañero llegó a Jarandilla en torno a las 13.30 horas, mientras que los últimos ficharon en el control de San Francisco cuando el sol ya se había ocultado y el frío comenzaba a helar los campos.