El examen práctico de las oposiciones de educación musical no se tocará. La Consejería de Educación confirmó ayer a este diario que está redactando la convocatoria de las oposiciones y en ella se mantendrá la segunda prueba de música como hasta ahora. "Desde la consejería queremos tranquilizar a las personas que se han alarmado porque no va a haber modificaciones al respecto", señalan desde la Administración regional.
El mensaje de la consejería tranquiliza a los interinos de esta especialidad que llevan desde la semana pasada en alerta después de que la Administración educativa propusiera a los sindicatos en mesa técnica cambiar ese segundo ejercicio práctico de oposición por un supuesto práctico escrito. El planteamiento del Ejecutivo, dice, serviría para homogeneizar el proceso entre todas las especialidades y para agilizar la adjudicación de plazas tras las oposiciones puesto que la práctica de música requiere más tiempo que el resto de las pruebas prácticas de otras especialidades.
Ante esta propuesta, que ya parece descartada, un grupo de interinos ha iniciado una campaña de recogida de firmas que remitirán a la directora general de Personal Docente porque creen que hacer un cambio en el sistema de oposición a solo tres meses de los exámenes es contraproducente para ellos --muchos llevan ya meses preparándose en academias de música este ejercicio práctico-- y porque además estiman que no tener que demostrar de forma práctica las capacidades musicales en las oposiciones podría perjudicar la calidad de la enseñanza. "Sería como hacer un examen de inglés en español", critica Héctor Archilla, presidente de la Asociación de Profesionales de la Educación Musical en Extremadura, que apoya la protesta de estos interinos extremeños.
TRES EJERCICIOS La movilización parece haber surtido efecto para descartar la propuesta planteada por la consejería a los sindicatos educativos. Así, señala que el ejercicio práctico de la especialidad de música será como el de las últimas oposiciones de 2013. Constará de tres ejercicios: componer una pieza musical e instrumental para utilizar en el aula (crear la melodía, armonización e instrumentalización a elegir entre dos textos dados por el tribunal de la oposición), leer a primera vista un fragmento musical --mínimo de 16 compases y máximo de 24 compases-- sobre una partitura dada por el tribunal y, por último, interpretar con la voz y/o con un instrumento aportado por el aspirante un fragmento musical a elegir sobre dos partituras dadas por el tribunal. La duración máxima de esta prueba será de dos horas y la calificación será la media de los tres ejercicios. De esta forma, los interinos creen que quedan demostradas las capacidades didáctico-musicales del aspirante.
Los sindicatos educativos entienden la petición de los opositores de educación musical pero también consideran positivo homogeneizar el sistema, como estiman desde PIDE, que insta a la Junta a que se pronuncie cuanto antes sobre el desarrollo elegido en ese segundo ejercicio para evitar la inquietud de los opositores. Desde el sindicato ANPE consideran que deben ser los asesores especialistas quienes consideren si es oportuno o no el cambio de sistema garantizando la calidad de la enseñanza.
