La Consejería de Educación y Empleo de Extremadura ha considerado la posibilidad de que la asignatura de Religión, en casos determinados, pueda ser impartida en aulas con unos 15 estudiantes, si bien esta medida no es excepcional, han informado fuentes de la Junta de Extremadura.

Educación ha sondeado todas las posibilidades para compensar la reducción horaria de los docentes de Religión y ha analizado diferentes informes jurídicos.

Esta consideración, según se añade, "no es una medida excepcional", pues se van a aplicar para Educación Secundaria los mismos criterios de alumnos por clase que ya se aplican, igualmente en casos determinados, en Infantil y Primaria.

Por lo tanto, no es una medida extraordinaria y no se han tenido que cambiar ni órdenes ni decretos para ello. Cabe destacar que también las asignaturas optativas tienen una ratio más baja.

Según la consejería, esta medida no soluciona la reducción horaria que tendrán algunos de estos docentes debido a la disminución de tiempo de Religión, comprendida en el nuevo decreto de ESO y Bachillerato, que proporciona mayor carga horaria a las asignaturas troncales.

La consejería explicará, "con todos los datos y detalles", la medida a los sindicatos de la enseñanza en una próxima Mesa Sectorial de Educación, a pesar de que estos mismos agentes rechazaron que se debatieran las posibles soluciones planteadas por la consejería para compensar la reducción horaria de los docentes de Religión.

Educación ha aplicado igualmente más medidas para compensar la pérdida de carga horaria de otras asignaturas, como incluir en toda la oferta de Bachillerato materias optativas que, a priori, sólo estaban diseñadas para una de las opciones.

Además, también se ha acordado en Mesa Sectorial de Educación la posibilidad de que algunos docentes afectados por el nuevo decreto puedan impartir clases de refuerzo en los programas PMAR y PRAGE, de apoyo al alumnado de 2º, 3º y 4º de ESO que presenta mayores dificultades.