No parece que entre las medidas anticrisis que pudieran estar estudiando los alcaldes extremeños se incluya la posibilidad de bajarse los sueldos. El ejemplo del alcalde de Los Santos de Maimona, José Antonio Lavado, que ha anunciado que se reducirá un 50% la cantidad que cobra del ayuntamiento, no cunde, al menos no entre la mayoría.

En la comunidad, tanto la Junta como la Asamblea de Extremadura, y también algunos ayuntamientos, ya han anunciado la imposición de algunas medidas anticrisis, pero de forma global, en lo que es la institución y sus miembros. Hasta que hace unos días lo hiciera Lavado, nadie lo había hecho a título personal, y no parece que la iniciativa vaya a extenderse.

Este diario lo ha comprobado sondeando a una pequeña muestra de alcaldes extremeños, a los que se ha preguntado si estarían dispuestos a hacer lo mismo que José Antonio Lavado, dispuestos a reducirse el sueldo.

De los 30 alcaldes consultados por EL PERIODICO, tan solo tres manifestaron que estarían dispuestos a hacerlo, aunque dos de ellos pusieron peros. La alcaldesa de la localidad cacereña de Caminomorisco, Soledad Gómez, puntualizó que lo haría siempre y cuando todo los alcaldes lo acordasen así; y Luis Cándido Moreno, alcalde de Valencia de Alcántara, lo haría "de poder permitírmelo".

Solo el de la localidad de Jerte, Antonio García, que en sus 16 años como alcalde nunca ha tenido sueldo, "porque un municipio pequeño como el nuestro no se lo puede permitir", sí se mostró rotundo al considerar que en situaciones como la actual "veo muy bien que los alcaldes que tienen sueldo se lo bajen todo lo que puedan".

También matizan y hacen puntualizaciones los alcaldes --27 de los 30 consultados-- que se muestran contrarios a la reducción de sueldo. La mayoría de ellos justifican su negativa en que las cantidades que cobran de los ayuntamientos son más bajas de las que tenían en sus trabajos anteriores y, además, en que no tienen otros ingresos, por lo que no podrían permitirse reducir sus sueldos.

Y en cuanto a la valoración que hacen respecto a que el alcalde de Los Santos de Maimona haya decidido cobrar del ayuntamiento la mitad, la respuesta es generalizada: "Es una decisión muy personal, pero si puede está muy bien que lo haya hecho", a lo que algunos matizan: "El puede permitírselo porque tiene otros ingresos".

Entre los alcaldes de las principales ciudades de la región, respuestas dispares. Desde la nada comprometida de la alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, que tan solo indicó: "Es una decisión personal y como tal hay que tomarla"; a la alusión directa del alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, a Lavado, del que señaló "está a tiempo parcial en el ayuntamiento y en la diputación, y además tiene un despacho de abogados donde lleva asuntos de un montón de ayuntamientos, por lo que no es un sacrificio, pues puede vivir muy bien".

Y de la negativa a hablar de la alcaldesa de Plasencia, Elia Blanco; al no rotundo del alcalde de Mérida, Angel Calle, que tras hacer constar que él y todos sus concejales cobran menos que cuando ejercían sus profesiones, consideró, además, que bajarse el sueldo "solo sería un anuncio de cara a la galería, no tendría eficacia ni rentabilidad real".