Los niños han creado su propio cuento en torno al Camino de Santiago Mozárabe, Las aventuras de Mozarito, donde se describen las leyendas, las tradiciones, los monumentos o la flora y la fauna que el peregrino puede descubrir hoy a su paso por la provincia de Badajoz en su reto de ganarse el jubileo.

Es el trayecto que recorrían los cristianos bajo dominación musulmana para llegar a Santiago de Compostela, sesgún explica a Efe Esther Nieto, profesora del colegio emeritense Nuestra Señora de la Antigua. El centro puso en marcha en 2013 un proyecto educativo transversal para enseñar a sus alumnos, a través de diferentes asignaturas, las potencialidades del Camino Mozárabe de Santiago, donde Mérida y Don Benito son los enclaves de referencia.

Los alumnos aprenden en las clases de Lengua tradiciones orales como la leyenda de La Bella Leila, que pronunció la expresión de «amarga cena» cuando su castillo iba a ser dominado por los cristianos y dio origen, así, al nombre del pueblo pacense en el que se levantó la fortaleza, Magacela.

En Ciencias Naturales los chicos descubren que junto al Camino de Santiago pastan las ovejas de La Serena con cuya leche se elaboran los quesos cremosos de esta comarca (torta de La Serena). También que la región alberga una variada fauna con especies como el águila culebrera, el gato montés, la cigüeña negra o la avutarda. Con la excusa del Camino de Santiago, los alumnos de este centro, de entre 3 y 12 años de edad, se han empapado de las potencialidades que guarda el Camino Mozárabe y por eso pueden hacer de guías turísticos para los peregrinos que llegan al colegio de la capital autonómica para sellar su pasaporte.

Cuna del cristianismo

En Religión, como explica a Efe la directora del centro, Flor Montero, los escolares escuchan que la cuna del cristianismo ibérico reside en la mártir Santa Eulalia, nacida en la Emérita Augusta. Los estudiantes han creado varios murales de la santa, patrona de la ciudad de Mérida y víctima de la última persecución romana a los cristianos en el año 304, en los que describen su influencia en tierras españolas y portuguesas.

Hoy, 313 parroquias españolas y 70 portuguesas deben su nombre a la mártir emeritense. Además, 80 pueblos españoles y siete del país vecino llevan el apellido de Santa Eulalia en su nombre.

Si el peregrino llega con hambre y ganas de descubrir los sabores de esta tierra extremeña, los escolares les explican algunos de sus platos más singulares, como las perrunillas (mantecados) de Torrefresneda o el ajilimoje de Santa Amalia, elaborado con arroz, hígado, tocino y oreja del cerdo ibérico que pasta por las dehesas de encinas, robles y alcornoques.

Desde que ingresan en primero de Infantil (3 años), los alumnos «mediante cuentacuentos, conocen el vocabulario ligado al Camino de Santiago Mozárabe», explica Esther Nieto.

Siempre, con Mozarito (la mascota) como hilo conductor de todo este proyecto docente que, además de preparar a jóvenes embajadores, ha servido para poner en valor el territorio de una comarca que padece la despoblación y el envejecimiento de su entorno rural. Incluso han creado un juego de la Oca, explican las profesoras, cuyas casillas son los diferentes enclaves por los que discurre el Camino Mozárabe de Santiago.

Además, los niños «también están preparados para recibir a peregrinos extranjeros» con las instrucciones recibidas de sus profesoras de inglés y de francés. Monterrubio, Castuera, Campanario, La Haba, Santa Amalia, Trujillanos, San Pedro, Medellín... Son solo algunas de las aldeas, la mayoría muy envejecidas por el éxodo rural, que ahora cobran vida en boca de sus embajadores, los escolares del colegio Nuestra Señora de la Antigua de la capital autonómica.