Como viene sucediendo desde principios del 2009, los embalses extremeños reducen la cantidad de agua recogida, pasando de 7.153 a 6.594 hectómetros cúbicos en lo que va de año.

La situación se hace más grave en el caso del Guadiana, que se encuentra al 44,75%, con 3.400 hectómetros cúbicos de su capacidad total. La semana anterior contaba con 72 hectómetros cúbicos más y, respecto al año pasado, bajó 8,46 puntos.

La situación del Tajo no es menos preocupante, ya que se encuentra a 3,45 puntos por encima del Guadiana, con 3.194 hectómetros cúbicos, 1.353 menos que el año anterior.

A pesar de la bajada, 25 de los 40 embalses de Extremadura tienen menos agua que hace un año y 20 están por debajo de la media del último decenio. Respecto a enero, son 2 y 5 menos, respectivamente.

Las reservas hidráulicas nacionales se encuentran al 55´1% de su capacidad, con 29.983 hectómetros de agua embalsada, lo que representa una disminución de 682 hectómetros cúbicos respecto a los niveles de la semana anterior.