La alternativa preferente de Alconera no está aún descartada, pero los empresarios que promueven un matadero de cerdo ibérico en la región están estudiando otros terrenos para el proyecto, y entre las posibles opciones, la que más consenso encuentra por el momento está en Zafra, según se puso de manifiesto en la doble reunión que mantuvieron ayer por la tarde los promotores: primero un consejo de administración y más tarde un encuentro con técnicos de la Junta de Extremadura, para evaluar los escollos que puede haber en las alternativas que contemplan. «Siempre serán enclaves en el sur de la provincia de Badajoz, que es donde tenemos nuestras empresas y la mano de obra especializada que necesitamos», señaló a este diario Enrique Espárrago, uno de los integrantes de Cibex, las siete firmas que promueven el proyecto.

El problema con los terrenos que se habían elegido en Alconera radica en una explotación porcina que se encuentra a 600 metros de donde se prevé el matadero, cuando la distancia mínima por ley es de un kilómetro. Como ya explicó este diario el pasado mes de enero, se había abierto una negociación, y los empresarios lanzaron una oferta al propietario de la explotación para que cesara la actividad allí, pero este les ha exigido una compensación «muy por encima», lo que les ha llevado a poner de nuevo sobre la mesa otras opciones que ya estudiaron. Esta de Zafra, en concreto, se evaluó antes de la de Alconera y se aparcó «por su excesivo coste». Además del proyecto, habría que crear un acceso y realizar las conexiones de agua y luz, y también solucionar los problemas de vertidos (esto último sucedía igualmente en la opción de Alconera, pero la Junta les ayudó a solventarlo).

Además de la opción de Zafra, los empresarios sopesan otras dos posibles ubicaciones que ayer remitieron a los servicios técnicos de Junta para que se evalúen posibles inconvenientes. «La opción de Alconera no la descartamos, pero no podemos aceptar lo que nos están pidiendo porque es algo desorbitado», recalcó Espárrago.

en verano/ Los empresarios aseguran que mantienen el interés en el proyecto aunque reconocen que las trabas retrasarán los plazos previstos inicialmente. Los trabajos iban a comenzar en marzo y ahora la idea es poder tener en un par de semanas definida la ubicación, para poder comenzar la obra en verano.

La portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, se pronunció ayer sobre las trabas del proyecto preguntada por los medios tras el Conejo de Gobierno: «el cumplimiento de las leyes no son escollos administrativos, es seguridad jurídica para que esas decisiones no las tumben luego los tribunales», afirmó, según recoge Europa Press.