Las últimas encuestas realizadas por el PP y el PSOE en Extremadura de cara a las próximas elecciones autonómicas han dejado a un lado su matiz de oráculo para convertirse en un arma arrojadiza entre partidos. Grado de conocimiento de candidatos, victorias por mayoría, pérdidas de votos... Más que para marcar el camino a seguir, los resultados sirven para argumentar que los datos del oponente son falsos. Todo depende de quién elabore los sondeos y de cómo se interpreten los resultados.

Como ejemplo, socialistas y populares polemizan estos días sobre los resultados de una encuesta realizada este verano y que, según el PP, refleja con claridad que la formación conservadora repetirá mayoría absoluta en los ayuntamientos de Badajoz, Cáceres y Mérida, por encima de los resultados de los comicios anteriores.

Pero, además, el portavoz del PP de Extremadura, José Antonio Monago, insistió ayer en que ha crecido el nivel de conocimiento de los populares por parte de los votantes, según otra encuesta regional, lo que supone "la antesala de una victoria regional". Entre las conclusiones de este sondeo, además del avance del PP, se destaca la imagen de desgaste del PSOE como partido "autoritario, antiguo e ineficaz".

Si se repasan los resultados de los sondeos del PSOE la cosa cambia considerablemente. Asegura el portavoz regional del PSOE, Francisco Fuentes, que "todas las encuestas" sobre intención de voto, incluso las que tiene en su poder el PP, para las próximas elecciones autonómicas realizadas en Extremadura indican que se mantendrá la "amplia mayoría" con la que cuentan actualmente los socialistas.

Pero Fuentes va más allá y sostiene que las encuestas de los populares son "supuestas" y que su intención es "dar moral a la tropa y hacer trampas jugando al solitario" sumando a los indecisos, una cuestión que, a su juicio, puede ser la clave que "esté detrás" de los resultados que anuncia el PP.

Ante esto, afirma rotundamente que "todas las encuestas que se han hecho coinciden desde el punto de vista municipal en que si se tiene en cuenta el voto más simpatía, el PSOE gana en Mérida y el PP pierde la mayoría absoluta en Cáceres y Badajoz".