La situación que atraviesa el sector del tomate ha originado también un enfrentamiento entre la Junta y el PP respecto a las políticas aplicadas por cada partido. En este sentido, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente considera que, para que el sector del tomate en Extremadura no se vea perjudicado, el PP debería mantenerse al margen, después de que su última acción fue la de retirar las ayudas a las industrias tomateras extremeñas, conllevando pérdidas de más de 6 millones de euros para el sector.

La Junta insiste en que la situación del tomate deriva de aquella decisión "errónea" que consistía en haber establecido un sistema de penalización basado en la media de producción de los tres años anteriores.

Por su parte, el responsable de Agricultura del PP de Extremadura, Diego Sánchez Duque, ha calificado a los socialistas como "inmovilistas" en la defensa del sector del tomate "después de ver las actuaciones que llevan a cabo y la afonía política que sufren, en la que sólo hacen que mirar al pasado y no afrontar los problemas futuros".