Extremadura ha pasado en los últimos cinco años de contar con 100 establecimientos de turismo rural a los más de 500 que existen en la actualidad, una cifra que pone de manifiesto el importante desarrollo del sector en la región y la necesidad de conseguir una oferta de calidad para que la demanda se siga manteniendo.

Consciente de ello, la Administración regional ha puesto en marcha un convenio, que se firmó ayer, con 40 ayuntamientos y 6 mancomunidades, para la prestación del servicio de información turística. La Junta aporta con ello 862.000 euros para que cada ayuntamiento pueda contratar a personal cualificado en sus oficinas de información turística.

Actualmente, más del 90% del turismo que acude a Extremadura centra sus visitas principalmente en siete localidades: Cáceres, Mérida, Guadalupe, Trujillo, Plasencia, Zafra y Badajoz. Esta situación es la que pretende corregir el convenio.

Para ello el programa aprovechará el tirón que tienen estas ciudades para proyectar el resto de la región, de forma que puedan aumentar las pernoctaciones y distribuir mejor los beneficios en el territorio.

El convenio trabajará especialmente en una mejora de la profesionalización de las personas que atienden a los turistas en el entorno rural, para lo que se pondrá en marcha un programa especial de formación. También está previsto avanzar en la homogeneización de la señalización, de forma que las nuevas oficinas cuenten con un logotipo específico que permita identificarlas.

La Administración incidirá también en experiencias como la primera Feria Ornitológica de España, celebrada recientemente en Monfragüe, y que ha supuesto un importante éxito tanto a nivel regional como nacional.