El sindicato CSI-F ha advertido de que la "escasez" de la oferta de plazas de funcionarios de prisiones "afectará" a los centros de la comunidad extremeña.

En concreto, ha alertado de la "reducción sistemática" de la Oferta Pública de Empleo de plazas de funcionarios de prisiones que, según indica, en tres años ha pasado de 1.123, en 2009, a "tan solo" 60 nuevos puestos este año en "todo" el territorio del Estado.

Se trata a su juicio de unas cifras "muy preocupantes" a las que hay que añadir una "probable jubilación masiva" en un periodo de ocho años, que tendría como consecuencia "la jubilación del 40 por ciento de la plantilla actual".

En nota de prensa, apunta así que las 60 nuevas plazas que saldrán a concurso público en septiembre se incorporarán a las plantillas en 2012, lo que para CSI-F supone que durante este 2011 "no habrá casi" incorporaciones, lo que agravará según dice la situación de "saturación" de las cárceles de Badajoz y Cáceres.

Para CSI-F, esta "reducción" del número de plazas ofertadas va a originar que la proporción entre los funcionarios de nuevo ingreso y el aumento del número de internos sea "excesivo", lo que "repercutirá, sin duda, en una mayor dificultad en la vigilancia y en la seguridad interior de las cárceles extremeñas", indica.

Si a este hecho se le une las jubilaciones que según apunta se van a producir a lo largo de los próximos ocho años y el pase a segunda actividad de un "alto" número de funcionarios, para el sindicato, "el futuro de los centros penitenciarios se ve cuando menos preocupante".

Además, CSI-F considera "muy precaria" la situación actual de los funcionarios de prisiones que "ven cómo se reducen progresivamente las plantillas mientras aumenta la delincuencia en el período estival, aumentando peligrosamente el riesgo de trifulcas y agresiones violentas en las cárceles", concluye.