Menos nacimientos, menos población y menos niños en las aulas extremeñas. La tendencia demográfica de Extremadura está detrás de la caída de 1.976 alumnos en los centros educativos de enseñanza obligatoria en solo un curso académico. Así, durante el periodo lectivo 2015-2016 los colegios extremeños contabilizaron un total de 147.654 alumnos desde Infantil a la ESO, según el avance de datos estadísticos publicados por el Ministerio de Educación. Esto supone un descenso de casi 2.000 estudiantes respecto a un año antes (curso 2014-2015), cuando se registraron 149.624 alumnos, según las mismas estadísticas.

Por etapas educativas, los mayores descensos en términos absolutos se dan en la etapa de Infantil (de 0 a seis años), motivado por la rebaja de la natalidad especialmente desde el año 2009. En el segundo ciclo de Educación Infantil (de tres a seis años) se contabilizan 803 niños menos, mientras en el primero ciclo (de 0 a tres años) el curso pasado hubo 290 escolares menos que el año anterior. Los datos de escolarización son en realidad el reflejo de la rebaja de nacimientos y se irá sucediendo a lo largo de todas las etapas obligatorias. En los últimos seis años la región ha pasado de los 10.314 nacimientos contabilizados en el 2009 a los 8.854 bebés nacidos en el 2015. A la etapa más perjudicada, Infantil, le sigue la Educación Secundaria, que pierde en solo un curso más de 620 estudiantes.

PREDICCIONES La tendencia no es nueva ni sorprende a los miembros de la comunidad educativa. De hecho, parece que se van cumpliendo las predicciones realizadas por el Instituto Nacional de Estadística, que en un informe prevé que Extremadura pierda 32.000 alumnos en los próximos 15 años. Para el año 2019 espera que se matriculen alrededor de 116.800 alumnos de entre 3 y 16 años frente a los más de 147.000 registrados el curso pasado.

Si contabilizamos el total de las enseñanzas no universitarias, no solo las etapas obligatorias --Infantil no lo es pero está generalizada--, Extremadura pierde en solo un año más de 2.000 alumnos, en concreto 2.597. Destaca la caída de 295 personas en los ciclos de grado medio y de casi 200 estudiantes de Bachillerato.

La situación extremeña se repite en la mayoría de las comunidades, sobre todo en las más rurales y que comparten problema demográfico con Extremadura: Asturias, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia. Pero también ha bajado el alumnado en el último curso en Andalucía, Baleares, Canarias y Comunidad Valenciana. En el conjunto nacional, pese a incrementar el número total de alumnos en todas las etapas, en el segundo ciclo de Infantil se mantiene la tendencia decreciente. Las aulas han perdido más de 108.000 alumnos de 3 a 6 años en los últimos cuatro cursos.