Uno de los principales objetivos del modelo español de aplicación de la Política Agraria Común (PAC) es el mantenimiento de la actividad agraria. Así lo afirmó ayer en Cáceres la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, quien detalló los ejes del citado modelo que ayer comenzó a ser debatido en Madrid con las diferentes comunidades autónomas y organizaciones agrarias.

Espinosa, que inauguró junto al presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el congreso internacional PAC, Modelo Agrario Europeo y Sociedad, organizado por la Consejería de Agricultura, aseguró que el modelo establece por una parte el máximo acoplamiento posible que permite la normativa, para asegurar que no se produzcan cambios bruscos de las decisiones de producción de los agricultores que conduzcan a desequilibrios territoriales.

La ministra manifestó que el desacoplamiento total es irreversible, mientras que el parcial puede liberarse en cualquier momento y permitirá mantener las rentas de los agricultores si se realizan las mismas actividades que en el pasado.

Por su parte, Ibarra se mostró crítico con la reforma intermedia y aseguró que la Junta no aceptará que haya desacoplamiento total. El líder extremeño incidió en que desligar totalmente la producción del pago de las ayudas resultaría nefasto para el futuro, pero precisó que se aceptaría discutir sobre un desacoplamiento distinto en función de que la actividad agraria fuera complementaria o principal.