Mal comienzo de año para el empleo en Extremadura: la región cerró el 2018 con un 9% menos de paro, pero solo en el primer mes del 2019 han sido 4.624 los extremeños que han vuelto a inscribirse en las listas del Sexpe. Esto es prácticamente la mitad de los que salieron de ellas en diciembre y las causas, una vez más, hay que buscarlas en la estacionalidad del mercado laboral y los contratos temporales.

Con este incremento, del 4,5%, la cifra total de parados registrados se sitúa en 106.167 personas, según los datos facilitados ayer por el Ministerio de Trabajo. El dato de afiliación a la Seguridad Social también ha sido malo, pues ha bajado en 7.521 personas. No obstante, al igual que en el caso del paro, el balance interanual sigue siendo positivo con un incremento de 7.239 afiliados.

El secretario general de Empleo de la Junta, Javier Luna, reconoció ayer que una subida del paro del 4,5% es «un mal dato», aunque también recordó que enero suele ser un mes negativo para el empleo por la finalización de las campañas del comercio, el turismo o la Administración. Luna destacó además que hay que remontarse 10 años atrás para encontrar en la región cifras absolutas de paro similares y recordó que en cualquier caso, la región cuenta hoy 8.599 desempleados menos que en enero del 2018.

A su juicio, los meses de enero suelen ser un punto de inflexión a la hora del cambio de la trayectoria. «A partir de este momento, la trayectoria nos indica que va a empezar a bajar nuevamente el paro registrado», auguró. En este sentido, señaló que el objetivo de la Junta es situar el desempleo por debajo de los 100.000 parados en junio y estar por encima de los 400.000 afiliados a la Seguridad Social en este año.

En el análisis por sectores, cabe destacar que el paro ha subido en enero en todos excepto en la construcción, con 389 empleos más, y el colectivo sin empleo anterior, con 91. Especialmente fuerte ha sido el incremento en el sector Servicios, que acumula el 94% de los nuevos parados, tanto en hostelería (720 desempleados más) como en comercio (652) y la administración pública (1.510). Una vez más, el paro afecta especialmente a las mujeres, con 3.312 desempleadas más inscritas en el Sexpe.

Por tanto, el perfil predominante de parado en la región es el de una mujer, de 25 a 45 años, que ha trabajado en el sector Servicios, especialmente en la administración pública, y con un bajo nivel de cualificación.

CONTRATACIÓN / En su análisis de los datos, Luna también destacó que «a pesar de que seguimos sometidos a las oscilaciones del mercado de trabajo, el empresario está estabilizando el contrato», especialmente en la construcción, el comercio y la industria. Ello se refleja en que en el último mes, la contratación indefinida ha crecido exponencialmente, un 38%, con un total de 2.024 nuevos contratos. No obstante, estos solo suponen el 4% del total de los firmados en enero.

Precisamente, la estacionalidad y la temporalidad son las causas a las que los sindicatos CCOO y UGT atribuyen nuevamente el aumento del paro en la región. Para CCOO, los datos de enero son «pésimos» y confirman la necesidad de derogar los aspectos «más lesivos» de la reforma laboral del PP, que ha originado contrataciones «de poca calidad, muy precarias y de muchísima facilidad a la hora de destruir puestos de trabajo».

CCOO reconoce que es habitual que el primer mes del año sea negativo para el mercado de trabajo, pero lamenta que el comportamiento de la región «ha sido aún peor que el nacional» (Extremadura es la segunda comunidad en la que más sube el paro en enero, por detrás de Cantabria) debido a su estructura económica y al abandono inversor del Estado en los últimos años.

En los mismos términos, UGT puso de manifiesto que el aumento del desempleo en Extremadura durante el pasado mes de enero se debe a la alta estacionalidad y la reforma laboral del PP, que permite «contratos precarios y mal pagados». No obstante, a pesar del fuerte aumento mensual, el sindicato destaca que el dato interanual es positivo, ya que se registra una reducción del 7,5% «que parece constituir una tendencia». Desde el 2014, año en el que Extremadura alcanzó el peor dato de paro registrado de la década, la reducción en el número de desempleados alcanza el 30,44%, y el 10% respecto al 2010, inicio de la crisis.

Sin embargo, y aunque «cualquier reducción es un dato positivo», UGT critica la lentitud de la creación de empleo, «que no va a conseguir colocarnos en una buena posición si no se acelera mucho». Alerta además de la brecha de género y expresa su preocupación por el hecho de que el 34,5% de los parados tenga más de 45 años.

Por último, el secretario general de la Confederación Regional Empresarial de Extremadura (Creex), Francisco Javier Peinado, solicitó un mayor apoyo para que las empresas puedan crear puestos de trabajo. El portavoz de la patronal explicó que el resto de sectores no tienen aún la suficiente fuerza para absorber la destrucción del empleo temporal que generan los Servicios y el campo y respecto a la construcción, señaló que aunque presenta cifras positivas, «no está creciendo al ritmo que lo hace en otros puntos de España». Así, para evitar esta «montaña rusa» del desempleo, la Creex demanda que los esfuerzos se focalicen en la formación y el perfil de los parados, para que se ajusten a las necesidades reales de las empresas.