No aparecen en los libros de texto, pero existen. Mujeres silenciadas, invisibles y ocultadas del relato sociocultural en la calle, también en la escuela, y ahora rescatadas por más de un centenar de estudiantes extremeños de Secundaria y Bachillerato. La invisibilidad de la mujer en los libros de texto es el título de un proyecto educativo interdisciplinar que se desarrolló el curso pasado entre varios departamentos del IES Maestro Gonzalo Korreas de Jaraíz de la Vera. El reto: sacar a la luz la vida de mujeres que han tenido una contribución relevante en distintas áreas del conocimiento, tanto en la antigüedad como en la actualidad, pero que no aparecen en los libros de texto. «El propósito del equipo ha sido hacer visible lo que hasta ahora ha permanecido olvidado», explica Miguel San Miguel, profesor de Filosofía del centro y padre de la iniciativa escolar.

Y el objetivo está conseguido. Los alumnos han visto reflejado su trabajo en una revista que han denominado Sapere Aude -locución que significa atrévete a saber-. Aunque el camino no ha sido demasiado fácil. «Han tenido que hacer un auténtico trabajo de investigación porque en ocasiones ni siquiera en las fuentes de información tradicionales había documentación sobre muchas de estas mujeres y había que buscar otras fuentes», explica San Miguel.

«La idea surgió porque empecé a tabajar con el aprendizaje basado en proyectos, una nueva metodología educativa. El curso anterior elaboramos una revista en mi clase de Filosofía y propuse hacer ya una de carácter interdisciplinar, de centro, con más alumnos y departamentos y con un tema transversal. En ese momento el movimiento 8M empezaba a coger mucha fuerza y conscientes de la invisibilidad de la mujer en los temarios de las distintas materias, elegimos tratar este asunto», recuerda.

Durante todo el curso pasado, los estudiantes de distintos cursos de Educación Secundaria Obligatoria y de Bachillerato han trabajado por grupos en varias asignaturas para conocer la vida de aquellas mujeres relevantes en diferentes campos a lo largo del tiempo y que, por unas razones u otras, «no han tenido el reconocimieno ni la notoriedad merecida».

Y eso es precisamente lo que han indagado los estudiantes durante el curso pasado. Organizado en grupos, han removido el campo de la filosofía, de la literatura, de la historia, de la música, de la ciencia, del feminismo, de la mitología... y también reflexionan sobre el ostracismo de la mujer. «¿Qué nos hemos perdido? Este es el primer pensamiento que nos viene a la cabeza. Leyendo, buscando, averiguando... indagando en la red aparecen nombre de mujeres compositoras a lo largo de la historia que no conocemos y de las que nunca hemos oído hablar. ¿Dónde estaban? ¿No han sido lo suficientemente buenas como para merecer su lugar en un texto o en una cita? Ahí está el problema, de muchas ya no vamos a poder saberlo jamás, de otras, las menos, nos llegan retazos de sus obras o sus vidas que nos permiten intuir una genialidad nunca reconocida», cuentan en la revista.

Y el obstáculo de fondo, en cualquiera de los ámbitos del conocimiento, siempre ha sido el mismo: «el sistema patriarcal ha sometido a la mujer a un plano inferior y secundario negándoles su estatus de ciudadanas de igual derecho que los hombres. De ahí que sus aportaciones a la sociedad no se hayan valorado ni dignificado».

Sorpresas para todos

Durante el desarrollo de este trabajo de investigación no solo han aprendido los alumnos, sino también los docentes. «Lo curioso de este tipo de metodología es que no solo ellos han descubierto cosas nuevas, también nosotros. Teníamos la conciencia de esa invisibilidad de la mujer, conocía a personajes sobre los que había información, pero cuando llegué a los textos canónicos de la historia de la filosofía, no había referencias. Ha sido un auténtico trabajo de investigación», explica el profesor.

Él mismo fue uno de los más sorprendidos: «La imagen que usamos para la portada de la revista es Hipatía de Alejandría en el fresco de Rafael La escuela de Atenas, donde aparencen todos los grandes filósofos, pero jamás había reparado en que ella estaba allí porque eso no se cuenta. Para Rafael sí era visible en el Renacimiento, en cambio, para los historiadores de la filosofía no lo fue». Solo este detalle, insiste, refleja la esencia del proyecto educativo.

No ha sido la única sorpresa. «Es muy curioso ver la influencia que ejercían algunas mujeres y, sin embargo, el que pasaba a la historia y se hacía famoso era el marido, el hombre», insiste el profesor. Es el caso, cuenta, de Aspasia de Mileto, la mujer de Pericles. «Era maestra de retórica y dialéctica y ejercía una gran influencia sobre su marido, ella era realmente el cerebro, pero estas referencias normalmente no aparecen en la política y la historia de Pericles».

Las Sinsombrero y de Pizán

Además del mundo clásico y otras áreas de conocimiento, la revista cuenta con un capítulo dedicado a la ausencia de nombres femeninos entre los premios literarios mundiales. ¿Mujeres sin premios o premios sin mujeres? «El Nobel de Literatura se creó hace 118 años y solo han sido galardonadas 14 mujeres. Y el Cervantes, de entre 42 premiados solo cinco son mujeres».

Además, rescatan al grupo conocido como las Sinsombrero, mujeres pensadoras y artistas españolas pertenecientes a la Generación del 27 pero poco estudiadas y olvidadas, reflexionan sobre el pasado y el futuro del feminismo, que ya existía en plena Edad Media con Christine de Pizán como precursora del movimiento a favor de las mujeres. «Con sus obras y su creciente popularidad, intentó llevar a primera plana el problema de discriminación que sufrían las mujeres en las sociedades medievales», relatan los alumnos. Fue la impulsora de un movimiento poderoso del siglo XV al XVIII, la Querella de las Mujeres, que defendía su derecho a la cultura y a la educación.

Y el último capítulo de este trabajo mira a Portugal. En esta materia los alumnos han querido poner el foco en grandes mujeres del país vecino, entre las que detacan la científica Mónica Bettencourt-Dias o la política Leonor Beleza.

La revista, con una tirada de 250 ejemplares que ha sido financiada por el centro, el CPR y el ayuntamiento de la localidad, lleva semanas en la calle y ha tenido muy buena acogida. Tanta, que el centro ya está trabajando este año en la segunda parte de este proyecto educativo. A final de curso quieren volver a lanzar una nueva edición de Sapere aude y para esta ocasión están investigando sobre la postverdad y las fake news. Su objetivo, de nuevo, sacar a la luz la verdad. Esa a la que a veces, como en el caso de la mujer, los libros prefieren obviar.