El Gobierno de Castilla-La Mancha reiteró ayer su oposición a un hipotético trasvase entre el embalse cacereño de Valdecañas y el Levante español. El ejecutivo castellano-manchego insistió en esta postura el mismo día en el que la Consejería de Fomento hacía pública la convocatoria para la contratación del servicio de consultoría y asistencia técnica para el estudio de la factibilidad de esta infraestructura. La fecha límite de presentación de las ofertas es el 23 de noviembre próximo y el plazo para desarrollar este estudio será de nueves meses. El informe también abordará la viabilidad de un trasvase Tajo-Guadiana dentro del territorio extremeño.

El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, señaló ayer que la petición de un trasvase del Tajo medio al Segura "no se justifica" ya que, "alguna institución gestora del agua de Murcia ha dicho que todo el abastecimiento humano (de esa región) podría garantizarse sin el trasvase". Por este motivo, precisó, el trasvase del Tajo medio al Segura "no tiene mucho sentido" puesto que, recientemente, se ha sabido que, mientras que "la cabecera del Tajo está al 15% de sus reservas, la cuenca del Segura tiene un 40% más de reservas que el año pasado".

Martínez Guijarro pidió prudencia a la hora de tomar una decisión en este asunto a la vez que destacó la mala situación que atraviesa actualmente la cabecera del Tajo: "Llevamos muchos meses sin que llueva y las reservas se están reduciendo semana tras semana", dijo.

"NO ROTUNDO" Más contundente aun fue el alcalde de la localidad toledana de Talavera de la Reina, José Francisco Rivas, quien dijo que según se han presentado las cosas por parte del Ejecutivo extremeño en relación a esta infraestructura, "no existe otra posibilidad que dejar este estudio aparcado".

El regidor talaverano sostuvo que "se deben respetar estos acuerdos de la Junta de Extremadura en la medida que no afecten a otras partes del territorio español, pero lo que es cierto es que un trasvase desde el Tajo medio nada de nada, no rotundo, porque se han otorgado una competencia que no está en manos de una comunidad autónoma".

En este sentido, José Francisco Rivas resaltó que la vicepresidenta primera del Gobierno extremeño, María Dolores Pallero, le ha dicho que ha habido un "malentendido" sobre la propuesta de este estudio de viabilidad. "Ellos consideran que todo es un malentendido porque lo que se está haciendo a raíz de un acuerdo del parlamento extremeño por unanimidad es hacer estudios para ver de manera fiel y real cuáles son las necesidades hídricas en un horizonte de cincuenta años".

NO CONLLEVA UNA DECISION En esta línea, la Junta de Extremadura aseguró hace menos de dos semanas que el informe de viabilidad sobre el trasvase "no conlleva la toma de ninguna decisión", ya que se trata solo, insisten, de un estudio informativo que tiene como fin obtener "toda la información necesaria" para planificar la política del agua de la Administración autonómica en los próximos años. Esto incluiría diversos aspectos como las obligaciones de suministro a Portugal, los caudales ambientales necesarios para el mantenimiento de los ecosistemas acuáticos o la valoración de la influencia del cambio climático.

La convocatoria, realizada por la Consejería de Fomento, fue publicada ayer en el Diario Oficial de Extremadura con un presupuesto base de licitación de 425.000 euros.