Qué papel juega el Viejo Continente y sus ciudadanos en el desarrollo y los Derechos Humanos en Africa y América? A esa pregunta trataron de contestar ayer la mayor parte de los conferenciantes y ponentes en la segunda jornada del IV Foro Internacional Democracia y Cooperación, que se desarrolla en el Complejo Cultural San Francisco. Por videoconferencia Samir Amín, director del Foro Tercer Mundo, aseguró que lo primero que hay que abordar es la gestión poscolonial del Africa Subsahariana, aunque afirma que cuanto más se abre Africa menos capitales recibe. Así, el aumento de la deuda externa es un saqueo de los pueblos primitivos.

Samir concluye: "Es necesaria una cooperación sur-sur --no norte-sur-- que favorezca el fin del monopolio tecnológico y que los países creen sus propias tecnologías. La opción política ideal para conseguir todo ello es la democratización --que no democracia-- asociada al progreso social bajo una perspectiva socialista, respetando la soberanía nacional".

CUNA DE VALORES Por su parte, François Houtart destacó que podría pensarse que Europa puede jugar un papel mediador y positivo en el orden internacional por ser la cuna de valores como la igualdad y la fraternidad. Sin embargo, Europa también ha sido crisol de otros movimientos de los que no se debe estar orgulloso como el colonialismo, la esclavitud o el nazismo.

Así, la Europa actual nace fruto de una unión capitalista fomentada por la burguesía y su objetivo no era la comunidad de los pueblos. Houtart destaca la oposición del pueblo francés a la Constitución Europea, de caracter neoliberal y que se apoya en EE.UU.

Houtart propugna un socialismo real basado en un valor básico como es el uso sostenible de los recursos naturales, dentro de una simbiosis entre naturaleza y persona enmarcada en un proyecto político.

La jornada de ayer se complementó con diversas mesas redondas sobre desarrollo en América Latina, Africa y Asia, en las que expusieron sus puntos de vista expertos de esos tres continentes.