Extremadura y Castilla-La Mancha se unen para prevenir la contratación irregular de inmigrantes, que es la causa, según la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, de los asentamientos ilegales en las afueras de las localidades con fuerte presencia del sector agrícola.Según detalla la agencia Europa Press, Pereira mantuvo una entrevista con su homólogo castellano-manchego, Máximo Díaz, para intercambiar información y experiencias acerca de la inmigración irregular, con el objetivo de consensuar soluciones e iniciar una línea de colaboración mutua, así como con los ayuntamientos afectados. A tales efectos, también estuvieron presentes en la reunión representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en ambas regiones. Por su parte, el delegado del Gobierno en Castilla La Macha destaca la necesidad de "aumentar los controles de inspección", así como "la importancia de colaborar ambas comunidades en la detención de este tipo de redes".