Unas 20.000 personas ejercen algún tipo de voluntariado en Extremadura, y de ellos un 60% están adscritos a alguna Organización no Gubernamental (ONG), según ha manifestado el presidente de la Plataforma Extremeña del Voluntariado, Jesús Gumiel.

Hoy se celebra en todo el mundo el Día del Voluntariado y, en palabras de Gumiel, en Extremadura, como en todo el mundo, la crisis también afecta porque "hay voluntarios que se dan de baja o están menos horas por las preocupaciones lógicas de tener un trabajo que ya no es seguro o estar desempleados".

De todas formas, con la recesión económica, "es cierto que hay más personas ayudando porque hay más gente necesitada".

Jesús Gumiel ha aprovechado para sumarse a las entidades sociales que han pedido al presidente extremeño, José Antonio Monago, que "el Presupuesto 2012 no reduzca las aportaciones a fines sociales, porque somos estructuras básicas de la sociedad extremeña".

El máximo responsable de la Plataforma Extremeña del Voluntariado explica que los últimos informes indican que en la provincia de Badajoz hay 12.491 personas voluntarias, que pertenecen a 197 asociaciones diferentes, 89 en la capital.

Un porcentaje en torno al 65% de los voluntarios pertenece a Cruz Roja o Cáritas.

Este es uno de los motivos que explica que dos tercios del total de las asociaciones extremeñas cuente con menos de 10 voluntarios, o que un 75% del total no tenga ninguna persona contratada.

Con estas cifras sobre la mesa, "es normal que el 52% de las asociaciones considere que tiene un número de voluntarios insuficiente o muy insuficiente para realizar su labor".

Como indica Gumiel, desde su Plataforma encuentran una gran dificultad para propiciar la participación de los ciudadanos en las organizaciones, y en muchos casos se debe a esta "deficiente capacidad organizativa".

Ambos motivos explican que las organizaciones de voluntarios tenga una "escasa financiación", que lleva a unos paupérrimos cauces de formación hacia el voluntariado.

La formación es el principal reto de estas asociaciones, "sobre todo en el ámbito rural", donde existe "escasa participación", un problema que se produce en todas las Comunidades españolas.

El voluntario extremeño tiene un promedio de edad de 34 años, y dos de cada tres son solteros.

Seis de cada 10 voluntarios extremeños tiene acabados los estudios de Secundaria o la Universidad, algo menos que el voluntario medio español.

Las principales áreas de actividad son los trabajos con colectivos de enfermos o discapacitados, físicos, psíquicos y sensoriales, seguidos de la ayuda y la cooperación al desarrollo y el tratamiento y prevención de las adicciones.