El regadío de Arroyo de Campo ya dispone del anteproyecto y estudio de costes de la zona regable que abarca 4.322 hectáreas, con un presupuesto base de licitación superior a los 68 millones de euros, de los que el 50% será aportado por los agricultores que se unan al proyecto de regadío privado.
Así lo ha trasladado a los alcaldes de la zona la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, en la presentación del anteproyecto.
Se trata de un proyecto incluido en la Agenda del Regadío Extremeño para el horizonte 2020, iniciado por la Junta de Extremadura con el objetivo y el convencimiento de que "actuar en regadío significa desarrollo económico y creación de empleo", ha explicado la titular de Desarrollo Rural.
Begoña García ha matizado que para que los proyectos sean creíbles tienen que ser "solventes y rigurosos y contar con el consenso de los agricultores".
En el acto han estado presentes el alcalde de Don Benito, José Luis Quintana; de Villanueva de la Serena, Miguel Ángel Gallardo, y el de La Haba, José González, quienes han agradecido la estrecha colaboración de la consejería con los ayuntamientos.
El presupuesto base de licitación para el nuevo regadío, que nace con una previsión de ampliación de 1.600 hectáreas en la zona de Los Quintos, representa un coste por hectárea de 15.786 euros para el riego de 1.782 hectáreas en el término de Don Benito, 1.529 en La Haba y 1.002 en Villanueva de la Serena.
Ello de acuerdo con los trabajos de delimitación cartográfica realizados sobre la base territorial de la concentración parcelaria Arroyo del Campo, que ha servido para mejorar las estructuras productivas de los agricultores de la zona, según detalla la Junta de Extremadura.
Entre las características incluidas en el anteproyecto destacan la aplicación de un sistema de riego presurizado mediante riego localizado por goteo y organización del riego colectivo a la demanda y captación de agua indirecta del canal del Zújar.
También resalta la impulsión en periodos con menor coste energético mediante bombeo a balsa elevada de 924.000 metros cúbicos y distribución por gravedad a la red de riego a través de una estación general de filtrado centralizada.
Además se posibilitará alternativas de cultivo como frutales, olivar intensivo, maíz, tomate de industria y cultivos hortícolas de invierno, con una dotación anual de 6.000 metros cúbicos por hectárea, y se optimizará el riego con la aplicación de sistemas de telecontrol y telegestión.
