La Junta de Extremadura ha declarado de interés para la comunidad autónoma el proyecto de regadíos de Tierra de Barros y no contempla una negativa del Gobierno central a apoyarlo y a aportar para ello una tercera parte de su financiación.

La portavoz de la Junta, Isabel Gil Rosiña, ha informado de la aprobación hoy, en Consejo de Gobierno, del decreto por el se amplía el perímetro de la zona regable de Tierra de Barros, se aprueba el Plan General de Transformación en Regadío de 15.000 hectáreas y se declara este proyecto de interés para la comunidad autónoma.

Esta actuación afecta a las localidades de Aceuchal, Alange, Almendralejo, Fuente del Maestre, Mérida, Ribera del Fresno, Solana de Barros, Torremejía, Villafranca de los Barros, Villagonzalo, Villalba de los Barros y La Zarza.

La aprobación de hoy, según Gil Rosiña, es el primer paso administrativo y el más importante que se da antes de la redacción de este proyecto.

La Junta de Extremadura ha calculado el coste de la puesta en regadío de las 15.000 hectáreas en 197 millones de euros, que incluye el proyecto, la licitación y dirección de las obras, las expropiaciones y la construcción de la infraestructura necesaria.

La financiación prevista de este plan correrá a partes iguales al 33 por ciento a la comunidad de regantes, al Ejecutivo extremeño y a la Administración General del Estado, según Gil Rosiña, quien ha reconocido que "quizás ésta última pudiera plantear el principal obstáculo que la Junta de Extremadura no va a aceptar".

Por ello, a pesar de que el Ministerio ya conoce el proyecto, hoy "con la formalidad" de lo aprobado, se enviará el decreto que aprueba el Plan General de Transformación de en Regadío de 15.000 hectáreas en Tierra de Barros al Gobierno central, para que "ya sí exista un pronunciamiento formal" por parte del Mapama.

El Ejecutivo extremeño, según su portavoz, confía en que el ministerio aceptará la viabilidad del proyecto, prioritario para esta comarca extremeña, y asumirá su parte de financiación.

"Por tanto, la Junta de Extremadura, con el máximo respeto institucional, va a trabajar hasta sus últimas consecuencias para que el Gobierno de España entre a formar parte de un proyecto que es viable", por lo que no se puede aceptar, ha insistido "una negativa que no atiende a razones".

A su juicio, a pesar de las reuniones mantenidas hasta el momento con el Ministerio, "ahora estamos en el inicio de la formalidad y confiamos en llegar a buen puerto".

Isabel Gil Rosiña ha recordado que del proyecto de regadíos de Tierra de Barros "se habló también mucho en la legislatura pasada", pero entonces solo se trató, ha recordado, de "papel mojado y brindis al sol".