La importancia del sector del tabaco en Extremadura "parece ir apagándose lentamente", ya que la superficie del cultivo se ha reducido notablemente en la región y, por lo tanto, en el conjunto del país ya que la comunidad autónoma acapara más del 90 por ciento del terreno dedicado a esta producción agrícola. Así se establece en el artículo El cultivo del tabaco se reduce de 24.000 a 10.000 hectáreas en las últimas dos décadas, publicado en el último número de la revista Caudal de Extremadura. Economía, agricultura, alimentación y turismo, y recogido por la agencia Efe.

En este trabajo se explica que el cultivo del tabaco es "uno de los motores económicos" del sector agrario de varias comarcas del norte de la provincia de Cáceres pero que "la importancia del tabaco en Extremadura parece ir apagándose lentamente, como si de un cigarrillo sin exhalar se tratara".

En este sentido, se argumenta que a principios de la década de 1990, y según el Anuario Estadístico Agroalimentario del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM), se cultivaba en el país una media de 24.000 hectáreas de tabaco mientras que ahora hay apenas 10.000, de ellas unas 9.100 en el norte cacereño y unas 60 en la zona de Medellín, "último vestigio del cultivo en la provincia de Badajoz".

Se añade que en 2000 se produjo en el país casi 43.000 toneladas de tabaco en rama y que en las últimas campañas esta cifra se ha reducido a poco menos de 32.000.

Entre tanto, se continúa, "la búsqueda de cultivos alternativos en la zona norte de Cáceres continúa, desde los frutales de hueso hasta la flores, el olivar superintensivo o las maderas nobles de roble".

Según la secretaria general de Medio Rural, Alicia Villauriz, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) estudia con las regiones, empresas y productores, mantener los ingresos del sector a partir de 2010, a través del mercado y las posibilidades que ofrecen las ayudas contempladas en los programas de desarrollo rural.

Villauriz se reunió ese día con miembros de la Unión de Cultivadores de Tabaco de Europa (UNITAB), para analizar el futuro del sector del tabaco en España.

El futuro inmediato del sector, según el ministerio, está marcado por el hecho de que en 2010 finaliza la implementación de la reforma del sector del tabaco aprobada en el año 2004 y que comenzó a aplicarse en 2006.

De acuerdo con la nueva legislación aprobada, en el periodo 2006/2009, España optó por conceder de forma acoplada el 60 por ciento de la ayuda percibida por los productores mientras que el 40 por ciento restante se da de manera desacoplada mediante pago único.

A partir de 2010, añade el ministerio, la legislación comunitaria obliga a conceder en forma de derechos de pago único, el 50% del importe de la ayuda global del periodo de referencia 2000/2002, mientras que el 50% restante se destinará a programas de reestructuración en las regiones productoras, en el ámbito de la programación de desarrollo rural.