La región extremeña dispondrá de 2,8 millones de euros para la convocatoria de este año destinada a las ayudas al alquiler de vivienda, según informó ayer el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles.

Este dio cuenta de las acciones que lleva a cabo su departamento en materia de vivienda, así como del acuerdo alcanzado la semana pasada con el Ministerio de Fomento, que permite incrementar la dotación que recibe Extremadura en la línea de ayudas al alquiler de 1,8 millones de euros, hasta alcanzar ese total de 2,8 millones para la convocatoria de este año.

El consejero destacó que la Junta ha actuado de forma responsable en éste ámbito y ha esperado a negociar que éstas salgan con la mayor cuantía posible, para evitar lo sucedido en la última convocatoria, que se sacó a finales de 2014 y que solo permitió dar cobertura a 208 ayudas de las más de 2.000 solicitadas, informa EFE.

Vergeles anunció también que la Junta ha llegado a un preacuerdo con la Sareb, el llamado banco malo, "en condiciones muy ventajosas para Extremadura", por el que la comunidad autónoma podrá disponer de entre 40 y 45 viviendas para que puedan ser alquiladas de manera inmediata por parte de familias que las necesiten.

IMPORTANTE ESFUERZO Según José María Vergeles, el incremento en las ayudas al alquiler ha supuesto un "esfuerzo" de Extremadura en la negociación y "en hacer visible la singularidad" que tiene la región dentro del Plan General de la Vivienda.

El consejero explicó que han hecho una consulta al Ministerio de Hacienda sobre si estas ayudas se podrían convocar sin estar aprobados los presupuestos de la comunidad autónoma correspondientes a 2016 o si habría que esperar a ello, y precisó, no obstante, que su convocatoria saldrá "cuanto antes".

Dentro de las gestiones que lleva a cabo su departamento en esta materia, el consejero indicó que han ofrecido también a las entidades bancarias un precio de alquiler razonable y que cedan a la Junta una parte de las viviendas vacías para destinarse a alquiler social.

También adelantó algunas de las líneas recogidas en el futuro Plan de Rehabilitación de Vivienda de Extremadura, como que apostará por fomentar los cascos urbanos frente a construcción de obra nueva en la periferia de pueblos y ciudades.

Asimismo, dará importancia a las líneas de ayuda relacionadas con la accesibilidad y la eficiencia energética y se apostará por la VPO y por un Plan 60.000 renovado como fomento de la obra nueva.

De igual forma, según el consejero, en el nuevo plan las convocatorias permanecerán abiertas todo el año y se irán evaluando conforme lleguen, mientras que se simplificarán los informes para aquellas personas que soliciten las ayudas.

En cuanto a la rehabilitación de vivienda en sí, Vergeles anunció que la participación del agente rehabilitador, que hasta ahora era preceptiva, será potestativa para la mayoría de los proyectos.

Sobre vivienda protegida, el consejero resaltó que el plan restablecerá las ayudas a la entrada de vivienda, lo que "es fundamental para las personas, pero también para los promotores", que podrán acceder mejor a los créditos financieros.

A preguntas de los periodistas, José María Vergeles indicó que actualmente en Extremadura algo más de 5.000 familias tienen solicitadas la concesión de una vivienda de VPO, de las que una 300 presentarían una necesidad muy urgente de disponer de un techo.