El Servicio de Análisis y Estadísticas de Extremadura, integrado en la Consejería de Economía, cambiará de formato a partir del primer semestre de 2009, para convertirse en el Instituto Regional de Estadística, cuya función será la obtención de datos más desagregados y específicos sobre la realidad de la región, que faciliten la toma de decisiones y la puesta en marcha de medidas administrativas, según recoge la agencia Europa Press.

Con la intención de que la información que genere este sistema medidor esté "completamente contrastada y estandarizada" y para evitar que se produzcan "desajustes o dispersión" de los datos, el Instituto Nacional de Estadística (INE) tutelará el proceso de creación del instituto extremeño.

La colaboración del INE se constituye con la firma de un protocolo de cooperación, rubricado por la vicepresidenta Segunda y consejera de Economía, Comercio e Innovación de la Junta de Extremadura, María Dolores Aguilar, y el presidente del Instituto Nacional de Estadística, Jaume García. Tras la rúbrica, Aguilar declara la "importancia" de este nuevo instrumento, "muy demandado, absolutamente necesario e imprescindible para la toma de decisiones por parte de la administración y, sobre todo, para que los ciudadanos extremeños tengan absoluta certeza de cómo se encuentra la región en esa fotografía de estadística descriptiva que proporciona el INE".

El Instituto Regional de Estadística, explica la vicepresidenta Segunda, "no suplantará ni duplicará" los recursos, la metodología y los sistemas de indicadores "perfectamente contrastados" con los que opera el INE, sino que, por el contrario, se basará en ellos para obtener información complementaria y desagregada a detalles pequeños y específicos sobre Extremadura.

La idea que "a priori" se tiene respecto al tipo de estadísticas que generará el instituto regional, parte de establecer un marco que permita determinar "hasta dónde" llega la información que respecto a la autonomía y sus provincias aporta el INE, para, a partir de esos datos, obtener aquellos que el instituto nacional "no abarca".

Según detalla Jaume García, el INE, "por razones de dimensión, de ámbitos geográficos, sectoriales y ocupacionales", "no llega" a cubrir las "necesidades" de información específica que requieren los gobiernos regionales y los agentes económicos y sociales, a la hora de tomar determinadas decisiones.

La creación de este instituto regional, añadió, permitirá que esos requerimientos concretos sean atendidos de manera "correcta y adecuada", sin que eso suponga que los datos que obtenga puedan llegar a ser incompatibles con los que genere el INE a nivel nacional. "Desde el punto de vista de la estadística, el peor de los escenarios sería una situación en la que tuviésemos diferentes generadores de información estadística no coordinados, en los que la comparabilidad de las cifras fuese nula y, por tanto, no tuviésemos referentes para nuestros análisis comparativos a la hora de evaluarlos y desarrollar distintas medidas económicas", comenta.

Este protocolo es un documento pionero. Aunque el presidente del Instituto Nacional de Estadística reconoce que existen algunos acuerdos con otras comunidades autónomas, subraya que "no hay precedentes" de un documento de esta "índole". "Esta es de las primeras experiencias de este tipo de colaboración, teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra el órgano estadístico en Extremadura. Este protocolo, que atiende el nacimiento del instituto regional, es el primero que contempla este desarrollo y la colaboración en completar esta información, desde el principio del proceso", asegura.