Extremadura es la cuarta región española con más agresiones a médicos, ya que Badajoz registró 5,32 por cada 1.000 profesionales y Cáceres 4,38.

El 65 por ciento de las agresiones a médicos se producen en el ámbito de la atención primaria, y Andalucía y La Rioja son las comunidades autónomas que encabezan el ránking de profesionales agredidos.

Estos son algunos de los datos recogidos en el registro nacional de agresiones a médicos elaborado por el Observatorio de Agresiones de la Organización Médica Colegial (OMC), dados a conocer hoy, y que contabilizan 451 casos denunciados durante el año 2010.

Si se extrapola esta cifra al total de médicos colegiados, se puede concluir que se producen 2,07 agresiones por cada 1.000 profesionales.

Estos datos no son más que la punta de "iceberg" del problema, ya que las denuncias todavía siguen siendo mínimas, señala el doctor Alberto Becerra, coordinador del Observatorio, quien solicita para los médicos iguales medidas de protección que para los políticos.

"Un médico agredido es exactamente igual que un político agredido", subraya el doctor Becerra, que demanda la misma repercusión mediática que la que tiene estos días la agresión sufrida por el consejero de Cultura de Murcia.

Tras Andalucía y La Rioja, se sitúan la Comunidad Valenciana y Extremadura como las comunidades que registran mayor número de agresiones, un dato que los responsables de la OMC ven en positivo ya que puede deberse a que en estas regiones se han puesto en marcha planes específicos en este sentido y se denuncia más.

En el extremo contrario, se encuentran comunidades como Aragón, Baleares y Navarra, que arrojan unos índices muy bajos de agresiones.

Por colegios médicos

Por colegios médicos, el de Jaén encabeza el ránking, con 8,19 por cada 1.000 colegiados, por delante de Cádiz (6,71), Castellón (5,49), Badajoz (5,32), La Rioja (5,27), Segovia (4,95), Málaga (4,91), Alicante (4,59), Cáceres (4,38), Orense (4,20) y León (4,08).

Las causas por las que los médicos sufren agresiones son variadas, aunque tres de cada diez son por discrepancias en la atención médica que se le presta al paciente.

Una de cada diez se debe a discrepancias personales entre el agresor y el médico y más de una de cada diez son por no prescribir lo que el paciente desea.

Del total de agresiones, el 18,5 por ciento tuvieron como consecuencia lesiones, mientras que el resto fueron verbales (amenazas, coacciones o insultos).

No obstante, el presidente de la OMC, Juan José Rodríguez Sendín, indica que "los insultos y las amenazas pueden hacer mucho daño", y el médico que las sufre "pasa mucho miedo".

A su juicio, la violencia en el sector sanitario no es más que el reflejo de la violencia que sufre la sociedad española en general y pide considerar las agresiones a los médicos "de forma seria" porque "deterioran el servicio".

Un 90,6 por ciento de las agresiones se producen en el sector público y solo un 9,3 por ciento en el sector privado.

En cuanto al agresor, no existe un perfil determinado, aunque destaca el hecho de que una de cada tres agresiones es realizada por un familiar del paciente.

No hay ninguna diferencia de sexos entre los médicos agredidos, aunque sí en cuanto a la edad, pues suelen ser objeto de estas acciones en mayor medida los del grupo comprendido entre 46 y 55 años.

Los datos reflejan también que el pico más alto de agresiones se produjo en verano, concretamente en el mes de julio.

Rodríguez Sendín argumenta que puede deberse a que en esta época del año es cuando hay más sustituciones de médicos y más desplazamiento de ciudadanos, que acaban siendo atendidos por profesionales que no son los habituales.

El 86 por ciento de los médicos agredidos se acogen a la baja laboral y un 91 por ciento habían sido objeto de agresiones previas.

Del total de denuncias, un 79 por ciento acabó con la apertura de diligencias.

El secretario general de la OMC, Serafín Romero, anuncia la decisión de esta organización de establecer el 12 de marzo como el Día Contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario.