El número de robos y hurtos con violencia descendieron en 2018 de un forma importante en Extremadura, según el último Balance de Criminalidad, pero, por contra, aumentaron los delitos contra la libertad sexual de las personas y las estafas. De hecho, este incremento se ha considerado como preocupantes, puesto que las agresiones sexuales pasaron de 10 a 21 casos en un año.

Según recoge la agencia Efe, la delegada del Gobierno en Extremadura, Yolanda García Seco, ha presentado en Badajoz las cifras del informe, en el que Extremadura mantiene en líneas generales la tasa más baja de delitos de España, con 24,7 casos por cada 1.000 habitantes.

El número de infracciones en la comunidad autónoma en 2018 fue de 26.535, 124 más que en 2017, la mayoría (18.057 casos) contra el patrimonio, en concreto robos, hurtos, sustracciones de vehículos y daños.

La cifra de estos delitos se mantuvo prácticamente igual en relación a 2017, aunque entre ellos los hurtos (6.614 casos) cayeron un 8,7 por ciento y los robos con violencia e intimidación un 9%, mientras que las sustracciones de vehículos a motor descendieron un 52,1% y los robos con fuerza en viviendas un 8,9%.

En cuanto a la infracciones penales contra las personas, es decir, homicidios y lesiones, entre otros, se produjo un descenso del 2,3 por ciento.

Por contra, las estafas aumentaron un 40,7 por ciento al pasar de 2.268 a 3.190 casos, unos delitos que se producen en su mayoría en la red y son fruto del engaño, por lo que el Ministerio del Interior hace una llamada de atención a todos los ciudadanos para que extremen las precauciones cuando realicen compras por internet o respondan a correos electrónicos fraudulentos.

Delitos contra la libertad sexual

En cuanto a los delitos contra la libertad sexual de las personas, aunque su número no es significativo en Extremadura sí se ha detectado un incremento preocupante con un aumento del 25 por ciento en lo referido a casos de agresión sexual, pornografía infantil, corrupción de menores u otros.

El incremento más preocupante fue el de las agresiones sexuales, que han pasado de 10 a 21.

Los delitos contra la seguridad vial aumentaron un 21,4 por ciento, de 687 a 834 casos, y el tráfico de drogas se incrementó un 15,9%, de 201 a 233.

En este último caso relacionado con "la presión" que sobre estos comportamientos delictivos ejercen tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional y que se saldó con varias operaciones "muy importantes".