La Comunidad Autónoma de Extremadura celebrará los próximos días 13 y 14 de junio la prueba individualizada a los alumnos de sexto de Primaria que, al igual que el resto de comunidades gobernadas por el PSOE, no será realizada por docentes externos al centro en el que estudian, como estipula la Lomce, y además "no tendrá efectos académicos" y formará parte de la evaluación continua del alumnado.

La fecha de la prueba, que realizarán 10.443 alumnos de la región, ha sido anunciada este jueves por la consejera de Educación, Esther Gutiérrez, en una rueda de prensa en Mérida en la que ha dado a conocer los detalles de la misma.

De esta forma, Extremadura va a realizar una prueba individualizada para los alumnos de sexto de Primaria como parte de la evaluación continua "habitual y ordinaria", y que va a realizar el propio profesorado del centro de sexto de Primaria.

Una prueba que servirá para comprobar el grado de adquisición de competencias en comunicación lingüística, matemáticas y competencias básicas de ciencias y tecnologías.

Tal y como ha venido indicado la consejera en comparecencias anteriores, esta prueba "no tendrá efectos académicos" y "por supuesto", no será utilizada para la confección de ránkings o comparaciones entre centros educativos o el propio alumnado.

De este modo, sus resultados solo servirán para comprobar, ha dicho, el grado de adquisición de las competencias y tendrán un "carácter orienativo y de uso interno" en cuanto al propio centro y a las familias, a las que se facilitará un informe con los resultados.

La consejera ha señalado que tras dar un periodo al Ministerio de Educación para que convocase la conferencia sectorial del ramo, se ha adoptado esta decisión ante la próxima finalización del curso y la necesidad de prepara las pruebas. "No podemos esperar más", ha dicho la consejera, con respecto a la decisión sobre la prueba, con el fin de "acabar con esa incertidumbre" que, ha reconocido, está viviendo la comunidad educativa.

ADAPTADA A LA LOMCE, PERO SUAVIZADA

Según ha explicado, el modelo elegido para la realización de la prueba es "una fórmula adaptada" a la Lomce, pero con una aplicación "lo más suave posible para minimizar los efectos nocivos" de la Ley.

En este sentido, ha recordado que el Ministerio de Educación propuso que la prueba fuera realizada por parte de evaluadores externos, es decir, profesores distintos a los que han dado las clases a los alumnos durante todo el curso, lo cual tendría "un efecto totalmente pernicioso" para el alumnado y para toda la comunidad educativa.

Al respecto, ha detallado que la propuesta del ministerio "no garantiza el derecho de los alumnos en cuanto a que su dedicación, esfuerzo y rendimiento sean valorados y reconocidos con objetividad, teniendo en cuenta la evaluación continua" de todo el curso.

En segundo lugar, ha argumentado que la Junta confía "plenamente" en la capacidad profesional de los profesores extremeños, que son "quienes mejor conocen a sus propios alumnos". Por otro lado, también ha señalado que con esta fórmula se evita el "nivel de estrés" que supondría para los alumnos de sexto de primaria ser evaluados por un docente diferente al que diariamente le imparte clase.

Y, por último, también ha resaltado que esta medida, que implicaría la movilización de más de 600 docentes supondría un coste de 100.000 euros a las arcas autonómicas, además de un "trastorno" para sus propios centros.

Gutiérrez ha remarcado al respecto que el propio Ministerio de Educación ha incumplido el decreto que regula la prueba en lo que respecta a la realización de la prueba por evaluadores externos en Ceuta y Melilla, donde tiene las competencias en la materia, y que por ello Extremadura ha decidido también que la hagan los propios docentes de cada centro.

La prueba estará supervisada, y será validada, por una comisión regional que se creará para tal efecto, y en la que estarán representados el profesorado, los equipos directivos de los centros y la inspección educativa. Para ello, la consejería está elaborando una instrucción, que próximamente será remitida a los centros, para que estos conozcan todos los detalles.

Asimismo, ha reprochado al ministro del ramo, Íñigo Méndez de Vigo, que no haya convocado la conferencia sectorial de Educación para acordar una propuesta común para todas las comunidades, lo que ha dado lugar, ha señalado, a que haya "prácticamente 17 modelos diferentes". "Cada uno lo está adaptando para bordear de alguna manera los efectos perniciosos y nocivos que tiene la Ley".

MISMO RECONOCIMIENTO

Por su parte, y a preguntas de los periodistas sobre si esta prueba tendrá el mismo reconocimiento a los alumnos que la propuesta del ministerio, el secretario general de Educación ha señalado que así será, puesto que se plantea, al igual que señala la Lomce, como una "evaluación final de etapa" y porque se ajusta a los "objetivos generales" de la misma.

Rafael Rodríguez de la Cruz ha añadido que las pruebas se enmarcarán en la evaluación continua de los alumnos, y que, por tanto, no serán "un pegote", que además estarán validadas por la citada comisión regional, que es la encargada de "verificar" el cumplimiento de la Lomce.

Con respecto a los contenidos, Gutiérrez ha señalado que la consejería remitirá próximamente a los centros un modelo orientativo, que podrán utilizar si así lo estiman oportuno, o de lo contrario será cada centro de acuerdo con sus criterios el que confeccione sus propias pruebas, si bien ha señalado que se adaptarán a los principios generales que marca la Lomce.