El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, José Luis Quintana, anunció ayer que la Junta impugnará el acuerdo adoptado el 1 de diciembre en la conferencia sectorial de Zaragoza por el que se regionaliza la superficie cultivable de arroz.

Este acuerdo supone que unas 5.000 hectáreas extremeñas no podrán recibir ayudas, lo que en la práctica aboca a los dos mil arroceros extremeños a soportar unas penalizaciones de en torno a los 4 millones de euros.

Quintana recordó que el reglamento de las conferencias deja claro que los acuerdos deben adoptarse "por criterios objetivos y no por amiguismos", que es lo que a su juicio ha ocurrido, ya que se ha beneficiado a unas regiones en perjuicio de otras.

Tras la pérdida de parte del cupo de arroz, las organizaciones agrarias Coag y Asaja culparon al propio Quintana por no haber sabido llevar las negociaciones, al tiempo que exigieron la rectificación del ministerio.

Mientras, tanto la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (Unexca) como UPA-UCE alertaron de la "competencia desleal" que provocará en el sector la medida, y UPA-UCE aprobará hoy mismo un primer calendario de movilizaciones.