Extremadura no registra más casos de gripe que otros años, 2.916 por cada 100.000 habitantes, una cifra que sitúa a la comunidad en la media del conjunto nacional, a pesar de haber sufrido picos de incidencia en su fase epidémica en enero que la han superado. El director gerente del Servicio Extremeño de Salud (SES), Ceciliano Franco, ha cifrado en 30.000 los casos de gripe que se han producido entre noviembre del año pasado y el día de hoy, el ciclo en el que se ha medido la incidencia de este virus.

En concreto, la enfermedad ha pasado a ser contagiosa en 42 casos por cada 100.000 habitantes. En la última semana se han registrado 66 casos por cada 100.000 habitantes y la máxima incidencia en el conjunto del período estudiado se ha dado en enero a partir de su segunda semana, con unos picos que se cifran en 364, 336 y 378 por cada 100.000 habitantes, y la mínima en noviembre. Esto, según Ceciliano Franco, se debe a las condiciones climáticas que sitúan a la región en el meollo de la incidencia del virus, además de que éste se extiende en dirección noroeste y sureste. El prototipo de la persona con mayor incidencia es varón de 47 años.