El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha destacado hoy que la Junta empezó el año siendo la administración autonómica "más morosa de España" y lo termina como "una de las mejores pagadoras", mientras que Extremadura en 2016 se ha convertido "en una sociedad más justa y más igualitaria".

En su balance del año que termina, Fernández Vara ha resaltado también, en clave económica, además del cumplimiento del pago a proveedores, que ha pasado de un plazo medio de 138 a 21 días, la renegociación de la deuda que ha permitido a las arcas autonómicas un ahorro de 65 millones de euros.

De igual forma, ha hecho hincapié en que en este año Extremadura se ha convertido en "una sociedad más justa", con 80 millones destinados a la exclusión social, lo que ha permitido "estar al día" en la renta básica y abordar programas de empleo social y de lucha contra la pobreza energética.

Aunque ha reconocido que en igualdad de género "queda mucho camino por avanzar", Vara ha indicado que la entrada en vigor de la ley de paridad, hace seis meses, ha permitido "una sociedad más igualitaria".

En otros ámbitos, el presidente extremeño ha recordado que los funcionarios de la Junta han recuperado la paga extra y todos los días de asuntos propios, "dos de los tres compromisos adquiridos hace un año", y la aprobación de un nuevo pliego en los concursos públicos con cláusulas sociales y medioambientales, que ha permitido que la mayor parte de ellos lo hayan ganado empresas extremeñas

En Sanidad, Vara ha reconocido que Extremadura "está viviendo una Navidad de altísima demanda sanitaria" debido a que se ha adelantado la epidemia de gripe y aunque ha pedido disculpas a quienes estos días "hayan tenido que esperar más de la cuenta", ha señalado que "el sistema está trabajando a pleno rendimiento".

Así, ha destacado que en 2016 de han realizado 3.561 operaciones y 7.000 resonancias magnéticas y TAC más que el año pasado, mientras que los recursos del Sepad para centros de día han aumentado un 21 por ciento y un 8,5 por ciento para ayuda a domicilio.

El presidente extremeño ha valorado también los avances en la "lucha frontal" contra la Lomce, la elaboración de los nuevos currículos de ESO y Bachillerato, la recuperación de la Filosofía o los logros de la Extremadura Film Commission que, tras "el trabajo de mucho tiempo", ha permitido convertir la región "en un gran plató de rodaje".

Con respecto al diálogo social, ha hecho hincapié en que ha posibilitado la puesta en marcha de un plan de impulso económico, "del que ayer pusimos la última piedra de este año, el Plan Renove de Mobiliario"; la Estrategia de Desarrollo de la Economía Social; la Estrategia de Empleo, con un gasto en 2016 de 180 millones de euros; el Plan de Prevención de Riesgos Laborales y el Pacto por el Ferrocarril.

Vara ha resaltado, de igual forma, la recuperación de los seguros agrarios y el nuevo convenio con los Grupos de Acción Local, para la inversión de 111 millones de euros en los tres próximos años en Extremadura.

También se ha referido a las buenas relaciones con el resto de instituciones, aunque ha reconocido que ha sido un año "difícil" debido a las "cartas no precisamente de amor" que Extremadura ha recibido del Ministerio de Hacienda en las que se amenazaba con retener fondos a la región.

Ha destacado que la comunidad extremeña ha logrado en tan solo un año reducir un punto su cumplimiento de déficit, debido a "un esfuerzo titánico" y "sin descolocar la vida de la gente".

Entre otras cifras, Fernández Vara ha citado que en este último año hay 7.000 parados menos en Extremadura y 6.747 afiliados más a la Seguridad Social, mientras que la facturación del turismo ha crecido un 8%; las ventas del comercio minorista, un 2,10%; las exportaciones, un 1,1% hasta septiembre; y la confianza empresarial en el cuarto trimestre, que ha subido un 1,8%.

Vara ha aclarado que "nada de esto" es mérito de él, sino de "mucha gente que está haciendo las cosas bien en muchos sitios" y ha agradecido su trabajo los 50.000 empleados públicos de la Junta.

Finalmente, ha indicado que "hay realidades que no se pueden asumir en ningún caso", como las muertes en el trabajo y la violencia machista, mientras que ha hecho hincapié en que "la lucha contra la precariedad laboral tiene que ser una batalla frontal".