MERIDA. Hoy finaliza el plazo para cerrar el acuerdo con las industrias sobre el precio de contratración de tomate para esta campaña, que a última hora de anoche aún no se había alcanzado. Si finalmente no se alcanza un pacto de precios, el plazo podría prorrogarse. El problema, según la organización agraria UPA-UCE, es que la industria pretende pagar un precio inferior al que se marcó la campaña pasada, cuando fue de 8,37 pesetas por kilo. Ante esta situación UPA-UCE solicita a los agricultores que no rompan la unidad de acción del sector para que se negocie con una postura más fuerte y sin que se alcancen pequeños acuerdos. La organización agraria cree que "no hay ninguna razón que motive un precio inferior y el agricultor ha realizado importantes esfuerzos".