La fiscal de la Tutela Penal de la Igualdad y contra la Discriminación, Carmen Barquilla, aseveró ayer que "afortunadamente" Extremadura es "una comunidad de convivencia y de integración", pero advirtió de que "está empezando a mostrar unos picos de racismo o xenofobia, que deben ser atajados desde el primer momento". Barquilla participó en la reunión del Comité Extremeño contra el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia. La fiscal abogó por atajar estos casos de racismo, "primero con la educación, y después, una vez que ya se han hecho visibles, ponerlos en conocimiento de la fiscalía para llevar a cabo la investigación del delito y del descubrimiento de los responsables".

Explicó en ese sentido que "es muy importante la libertad de expresión y opinión, pero también la tolerancia y el respeto a la dignidad e igualdad de todas las personas", ya que "ninguno de los derechos es ilimitado".

Carmen Barquilla atribuyó los casos de xenofobia a la situación de crisis y a que "determinadas personas utilicen ese sentimiento de falta de trabajo para fomentar el odio hacia toda aquella persona que no tenga el mismo color o no sea nacional". En ese sentido, consideró que "recordar la historia es muy importante" y España ha sido un país tradicionalmente de emigración, por lo que "nosotros debemos tener empatía con todo aquel que venga, ponernos en su lugar y ser respetuosos".

Precisó que el año pasado en la región sólo hubo un caso de denuncia de racismo o xenofobia, pero "al final no se pudo acreditar que se tratara de un acto discriminatorio". Actualmente se investiga los hechos puestos en conocimiento por la Asociación de Derechos Humanos sobre la difusión de un tuit contra los refugiados bajo el perfil "Reconquista" y del reparto de pasquines en ese mismo sentido por parte de un grupo ultra en la Estación de Autobuses de Cáceres. Según Barquilla, "hoy --por ayer-- se va a presentar la denuncia por estos hechos que pueden ser constitutivos de un delito de discriminación".