La semana comenzó tal y como acabó, con socialistas y populares enfrascados en un enfrentamiento dialéctico sobre la necesidad, o no, de un debate sobre el Estatuto catalán. El reto lo lanzó el líder del PP, Carlos Floriano, que instó al presidente extremeño a un cara a cara televisado en el que ambos pudieran defender su posición sobre el nuevo texto estatutario para Cataluña. La respuesta del mandatario socialistas tardó 24 horas y aceptaba el mismo en la cámara que representa a los extremeños, la Asamblea.

A vuelta del fin de semana, el frente político no ha variado en posiciones aunque sí en algunos argumentos. El lunes, PP y PSOE celebraron sus tradicionales reuniones de ejecutivas regional y el asunto principal sobre la mesa rondó de nuevo las repercusiones catalanas .

Los socialistas plantean cambios sutiles. El portavoz de la Comisión Permanente del PSOE, Francisco Fuentes, aceptó el reto del debate televisado, pero si ese era en el Parlamento extremeño. Fuentes respondía así al secretario de Comunicación del PP de Extremadura, Tomás Martín Tamayo, que afirmó que Ibarra y Floriano, deben debatir en televisión para que la opinión pública pueda comprobar "quién miente" sobre los supuestos beneficios o perjuicios de la reforma.

Desde el PSOE extremeño se ironizó con la respuesta. "Nosotros les ofrecemos dos por el precio de uno. Les ofrecemos un debate en el Parlamento y que sea televisado, a ver si así lo acepta", en referencia a la postura defendida por el líder popular de que uno y otro debate no eran incompatibles.

En los argumentos del PP, Tamayo se refirió a la "cobardía" de Ibarra y advirtió que en este nuevo marco político Extremadura "pierde muchísimo y va a quedar más marginada". En respuesta a Fuentes, el parlamentario popular acudió a la jerga taurina para preguntarse sobre cuáles son los motivos que llevan al presidente extremeño a tener "miedo" a un cara a cara con el líder de la oposición, y a "refugiarse en el burladero" de la Asamblea de Extremadura, en referencia a la intención de Ibarra de abordar el asunto en sede parlamentaria.