El ministro de Fomento ha confirmado que está manteniendo reuniones con inversores americanos y chinos interesados en cofinanciar la red ferroviaria española de alta velocidad. José Blanco declaró el pasado domingo, en un acto del PSOE en Santiago de Compostela, que ya ha establecido los primeros contactos con fondos de inversión internacionales con el objetivo de garantizar el dinero necesario para construir lo que queda del AVE a Galicia.

Fuentes del Ministerio de Fomento explicaron ayer que aún es pronto para saber si estos inversores también estarían interesados en la línea Madrid-Extremadura-Lisboa, aunque recordaron que el plan de colaboración público-privada aprobado por el Gobierno afecta a toda la red de alta velocidad.

El AVE extremeño (incluidos los tramos toledanos) sufrirá el año próximo un recorte presupuestario del 39%, el mayor entre todas las líneas de alta velocidad. El Gobierno lo ha justificado asegurando que el dinero necesario para licitar en el 2011 la veintena de tramos pendientes se conseguirá con una fórmula de financiación privada.

Fuentes del sector de obras públicas consultados por este periódico aseguraron que lo más probable es que el modelo que se utilice sea el de la concesión: los inversores privados ponen el dinero por adelantado para pagar las obras del AVE de las que sean adjudicatarios y luego cobran un canon al Estado durante un periodo de 25 años o más.

En la citada visita a Galicia, Blanco aseguró que su objetivo al reunirse con "inversores americanos, chinos y de todo el mundo" es "blindar la alta velocidad" para que llegue a Galicia a finales del 2015, que es el año al que el ministro se ha comprometido. En el caso de Extremadura, las fechas no están definidas.