Francisco Javier Olivera Vázquez, natural de Bienvenida (Badajoz), fue nombrado el pasado 3 de mayo presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Extremadura. Tiene 51 años y es maestro del equipo de apoyo a los alumnos con discapacidad visual. A partir de junio, comenta, será el momento de poner en marcha algunos proyectos que tiene en mente.

--Acaba de ser nombrado presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Extremadura. ¿Qué proyectos tiene? ¿Qué es lo primero que va a hacer?

--Como responsable del consejo territorial, debo coordinar al resto de miembros a la hora de establecer el contacto periódico con los más de dos mil afiliados a la ONCE que tenemos en Extremadura. Además, el consejo territorial es quien representa en nuestra comunidad autónoma al Consejo General (órgano de gobierno de la ONCE) y por tanto debemos velar por el cumplimiento de los acuerdos tomados por éste tanto en materia de juegos como de servicios sociales. Ahora estamos en el periodo de constitución del consejo territorial. A partir de Junio será el momento de poner en marcha todos los proyectos.

--La crisis está en boca de todos. ¿Su organización también la sufre?

--Claro, pero nuestros vendedores están haciendo un gran esfuerzo para que sus efectos sean los menores posibles.

--¿Los extremeños juegan ahora más o menos que hace unos años?

--El mercado del juego ya arrastra una crisis de más tiempo que la general, y por tanto la recaudación por el juego ha descendido, pero con los ajustes que la institución a puesto en marcha, nos vamos amoldando a cubrir objetivos y no solo no se ha destruido empleo, sino, que nos permite la creación de más puestos de trabajo. Además los servicios que la ONCE presta a sus afiliados siguen siendo los mismos y con mayor calidad.

--Su organización ha denunciado el perjuicio que le causa el juego ilegal o determinados usos de internet para apostar. ¿Lo están sufriendo en Extremadura?

--Sí, pero como hemos comentado con anterioridad, nuestros vendedores van amortiguando este perjuicio.

--Pese a esas malas prácticas, la ONCE se mantiene fuerte en la región. ¿A cuántas personas da trabajo?

--Si contamos tanto ONCE como Fundación ONCE y Corporación, unas 800 personas.

--Ahora todo el mundo denuncia las elevadas tasas de paro. Supongo que para una persona ciega encontrar trabajo aún será más difícil...

--Igual que para el resto de los discapacitados, pero tenemos el respaldo de la ONCE y esto nos permite afrontar la realidad con mayor optimismo.

--Para que los extremeños sepan en qué emplean el dinero que se gastan al jugar al cupón o al rasca, podría decir algunos proyectos que se han realizado en Extremadura.

--Apoyamos con nuestros equipos multiprofesionales a los alumnos discapacitados visuales en los centros educativos. Damos rehabilitación tanto visual como de orientación y movilidad a nuestros afiliados. Concedemos multiples perros guías. Damos atención tanto económica como ocupacional a un amplio colectivo de tercera edad. Damos instrucción en las nuevas tecnologías a los afiliados. Pero, sobre todo, damos empleo a un colectivo que si no fuese por la ONCE posiblemente no tendría un futuro muy positivo.

--Tal vez la imagen más usual que las personas tienen de la ONCE es la del cuponero vendiendo en la calle, pero su organización es mucho más...

--Como he dicho, la ONCE es quien educa, forma, da trabajo y bienestar a miles de discapacitados. En España a 130.000.

--Todavía hoy las personas ciegas o deficientes visuales encuentran dificultades como barreras arquitectónicas, uso de las nuevas tecnologías no adaptadas. ¿Recibe muchas denuncias al respecto?

--Recibimos algunas, si bien estamos en permanente contactos con los ayuntamientos para salvar estas dificultades.