Los sindicatos y la dirección de Fuentecapala celebraron ayer su primera reunión en el marco del proceso de negociación abierto tras el anuncio por parte de los responsables de esta firma textil de Navalmoral de la Mata de cerrar la planta y despedir a sus 37 trabajadores.

"No hemos avanzado mucho. Hemos solicitado documentación complementaria porque creemos que es esencial para analizar la realidad de la empresa", señaló al término del encuentro Saturnino Lagar, secretario general de la Federación de Industria de CCOO, que se mostró convencido, "con la documentación que tenemos ahora mismo encima de la mesa", de la viabilidad de esta firma. "Tenemos claro que esto es una estrategia empresarial, que lo único que se pretende es cerrar Fuentecapala y llevarse la producción a otro sitio. Y como sindicato vamos a intentar impedir por todos los medios que se salgan con la suya", afirmó este responsable sindical, quien dijo estar dispuesto a negociar solo cuando se propongan alternativas al despido de toda la plantilla.

Lagar argumentó que el año pasado el resultado de explotación de esta compañía arrojó un saldo positivo de más de 8.000 euros. "No entendemos que, con esa situación, la empresa nos diga que se tiene que llevar la planta. Y más cuando insisten en que Fuentecapala como marca va a seguir existiendo", recalcó. "Lo único que pretenden es llevarse la mano de obra de Navalmoral, de forma que la producción les salga más económica. Y contra eso vamos a luchar. No estamos de acuerdo en que se lleven la fabricación a otro sitio y aquí nos queden únicamente los despidos y el intento de recalificar unos terrenos para venderlos", aseveró.

A su juicio, si durante este último año la dirección de la empresa, en vez de estar celebrando "reuniones con el ayuntamiento para la recalificación, hubiese estado buscando clientes, la situación sería otra. Hay falta de clientes porque no se ha preocupado de buscarlos".

"Les hemos dicho que esto es una deslocalización pura y dura. Es algo que se ve en los datos económicos", coincidió Leocadio Núñez, secretario de organización de la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT Extremadura, para quien la única "hoja de ruta" que tiene la dirección de Fuentecapala es "cerrar y, si puede ser con una recalificación de los terrenos, mejor".

NOTIFICACIONES Según explicó Núñez, la intención de la empresa es enviar mañana miércoles una notificación a la práctica totalidad de los empleados --a excepción de "una o dos personas por temas de logística"-- comunicándoles el comienzo de un periodo de permiso retribuido. "A partir de esa fecha se dejará de producir", indicó. Igualmente, este responsable de UGT resaltó que durante el encuentro de ayer se había planteado la necesidad de que la empresa se ponga al día en el pago a sus empleados, a los que les deben tres meses de salario "mas la actualización de las tablas salariales desde el 2011".

Núñez recordó que ya "en dos ocasiones" el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) "ha tumbado" medidas de regulación de empleo presentadas por Fuentecapala, al tiempo que lamentó que ahora la única indemnización que ofrezca sea el mínimo que marca la ley --20 días por año trabajado con un máximo de doce meses--, muestra de que la empresa "por lo que menos mira es por los trabajadores".

"Lo primero que tiene que hacer la empresa para que nos sentemos todos de buena fe a negociar es que pague las nóminas", incidió en esta misma línea Saturnino Lagar, quien subrayó que a los empleados de Fuentecapala en Madrid sí se les ha pagado. "Aquí no lo hace porque lo que pretende es crear una situación de desasosiego total en la plantilla, para que le firme cuanto antes".

La próxima reunión entre la empresa y los sindicatos tendrá lugar el martes 28 de junio a las 11.30 horas. Ese día, los trabajadores, junto a familiares y antiguos empleados, se concentrarán en la puerta de la fábrica en señal de apoyo. "Por lo menos para hacer algo de presión", indicó Leocadio Núñez.