"Me gusta y me divierto haciendo esto. Además, creo que se me da bien y hago un producto muy vendible". Hace dos años que Nohemí Hornero puso en marcha en Losar de la Vera la empresa Alabaz Glass Design, una firma dedicada al diseño y elaboración de piezas de vidrio. A día de hoy, el balance que hace esta emprendedora de su andadura es más que positivo: "Nunca pensé que fuera a estar donde estoy. De ninguna de las maneras".

Nohemí entró en contacto con las técnicas de transformación del vidrio hace doce años, a través de un taller que impartían dos artesanos en la cercana localidad de Jarandilla de la Vera. Sin embargo, la idea de convertir lo que hasta entonces había sido un hobby en el medio de ganarse la vida llegó una década después y "un poco fruto de la casualidad".

Licenciada en Bellas Artes, tenía "un buen puesto de trabajo" como auxiliar administrativo en una multinacional, pero "con la crisis, y como tantas otras personas" acabó en el paro. "No soy persona de estarme quieta", explica, y decidió aprovechar este periodo de inactividad laboral para perfeccionar sus conocimientos en el trabajo con el vidrio, asistiendo para ello a varios cursos que se ofrecían en la localidad segoviana de La Granja. En uno de ellos, "los profesores me habían motivado muchísimo y me pregunté por qué no iba a poder hacer de esto mi medio de vida", recalca.

En un primer momento pensó en poner en marcha el negocio en Madrid, idea de la que desistió ante la carestía de los alquileres y los engorrosos trámites burocráticos. "Estuve quince días dando paseos de un sitio a otro buscando información, que me dijeran cómo hacer un plan de viabilidad", rememora. Estos obstáculos le hicieron decantarse finalmente por su pueblo, Losar de la Vera, donde contaba con un local de propiedad familiar y en el que la agente de desarrollo local le resolvió "en un ratito" todas sus dudas sobre cómo poner en marcha la empresa. Descubrió también el programa Nueva Empresa Extremeña (Neex), "el mejor invento del mundo". Lo que hizo a través de esta herramienta de creación empresarial "en Madrid me hubiese costado 3.000 euros", añade.

Nohemí indica que su labor tiene tres facetas: las de empresaria, artista y artesana. Así, las piezas se hacen siempre con métodos artesanales y "casi todas ellas son artísticas. Intento darles otra vuelta de tuerca para que no sean como ninguna otra. Darles un carácter exclusivo, de obra de arte". Artículos de joyería, decoración o menaje llevan la firma de esta empresa, que los realiza solo por encargo. "No hay ninguna idea que no sea factible con vidrio. Solo hay que encontrar la manera de llevarla a cabo", resalta. Lo que más demanda tiene son las piezas para regalo aunque el cliente no siempre llega con una idea definida. "También hago labores de personal shopper ", comenta.

Internet es la vía natural para la comercialización de sus productos, lo que le lleva a estar pendiente de forma constante de las pautas que marca "don google ", reconoce. "Hay que estar continuamente actualizando para que tu web se posicione", afirma convencida esta empresaria, que indica que las ventas ha repuntado sobre todo "en el último año". Dentro de España, Barcelona, Madrid, Bilbao o Valencia están entre los principales destinos de sus creaciones, que también han tenido muy buena acogida en el mercado italiano. Eso sí, asegura que no hay un perfil definido de cliente. Hay desde "gente corriente", hasta la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, o la primera dama de Panamá, Marta Linares de Martinelli.

De momento, Nohemí es la única empleada de la empresa, pero ya está pensando en ampliar plantilla. "No puedo estar en todos sitios", argumenta, por lo que busca comerciales o personas que sepan trabajar el vidrio.