La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, ha apuntado que las últimas reformas de la Política Agrícola Común (PAC) no han estado encaminadas a generar recursos para la creación de riqueza y empleo en el sector agrario.

Para Begoña García, la PAC, sobre todo en sus últimas reformas, ha abierto las puertas al desempleo en el sector agrario cuando comenzó a desacoplar las ayudas a la producción a las que la administración regional rechazó en su día.

La consejera ha mostrado también el rechazo de la administración regional a la reforma de la PAC que se está aplicando desde 2015 porque no define la figura del agricultor activo adecuadamente, como ya han reconocido las autoridades europeas. "Y es que el agricultor activo debe ser el profesional agrario o la empresa que ejerce la actividad agraria para producir alimentos y materias primas de calidad con un fin comercial y de una forma respetuosa con el entorno", ha agregado la consejera.

Pese a esas carencias en la aplicación de la PAC, García ha resaltado la fortaleza del sector agrario regional, que ha soportado la crisis económica con relativa solidez, como confirma el incremento de la renta agraria, la recuperación del porcino o la campaña récord del tomate para la industria.

INCENTIVOS La consejera ha señalado otro termómetro para medir la buena salud de nuestro sector en la convocatoria de los incentivos agroindustriales. La consejería destinará a estas ayudas 30 millones de euros dentro del PDR 2014-2020. A esta convocatoria se han presentado 326 empresas con unas inversiones que ascenderían a 190 millones de euros. Asimismo, 2.200 empresas van a mejorar y modernizarse este año gracias a la convocatoria de ayudas que ha puesto en marcha a los pocos días de aprobarse el nuevo PDR, y además hay otras 800 empresas creadas por jóvenes agricultores que también se acogen a estas ayudas.