El uso de medicamentos genéricos --más baratos al no estar sujetos a patente de fabricación-- ha permitido rebajar la factura farmacéutica de la sanidad pública en Extremadura en 181 millones de euros desde que se impulsó el uso de estos fármacos, hace ahora una década. Esto supone más de la mitad del gasto anual en medicinas, que durante el 2007 superó los 310 millones de euros.

Así lo muestra un estudio realizado por el laboratorio Ratiopharm --el principal distribuidor de medicinas sin marca-- en colaboración con los empresarios de farmacia. Según explicó Julián Dorado, representante de Ratiopharm, en los últimos años ha crecido tanto el uso de estos fármacos --se ha pasado del 1,2% de 1999 al 6,6% en el 2007 a nivel de toda España-- como en la aceptación de los mismos por parte de usuarios y médicos.

De este modo, los datos de una encuesta encargada por el laboratorio muestran que ahora ocho de cada diez pacientes aseguran que los genéricos no reducen la calidad de la prescripción, y casi el 40% de los médicos señala que más de la mitad de los medicamentos que prescribe son genéricos.

POCO USO AUN En todo caso, el representante de los empresarios extremeños de farmacia, Julián Castaño, señaló que el uso de fármacos sin marca es aún muy bajo en España, y más aún en Extremadura, donde se sitúa en el 5,7%, casi un punto menos que la media nacional. Castaño señaló que si se alcanzase el nivel europeo (el 12%) el ahorro podría duplicarse, ya que un genérico es, de media, un 30% más barato que un fármaco que aún esté bajo patente.

El representante de los boticarios extremeños indicó que uno de los problemas que inciden en la baja cuota de mercado de los genéricos es la política de precios de referencia implantada por la Administración sanitaria estatal, que definió como "actuación coyuntural" para contener el gasto en determinados momentos.

Castaño señaló que las reducciones de precios impuestas a los medicamentos de marca están haciendo que se abran cada vez más las diferencias de precio con los países europeos. A su juicio, esta medida tiene un recorrido corto, y mientras se está dejando de lado el impulso a los genéricos.

Según explicó, los laboratorios que fabrican fármacos bajo patente están acusando ya la falta de rentabilidad que supone la rebaja de precios "y ya hemos notado faltas puntuales de algunos medicamentos". Esto vendría determinado porque los laboratorios, al resultar menos rentable, destinan menos unidades al mercado español.

Por ello, reclamó una política a largo plazo, donde entrarían iniciativas como la anunciada prescripción por principio activo y no por marca de medicamento, de manera que se dé continuidad a incrementos del gasto farmacéutico en el entorno del 5% anual.

A lo largo del pasado año, en Extremadura este gasto se incrementó en el 5,14%, hasta situarse en 310,4 millones de euros, lo que supone en realidad un descenso del coste, puesto que el número de recetas subió algo más, un 5,86%, hasta superar los 21,5 millones. En toda España el gasto en medicinas pagadas por el sistema de salud fue de 11.191 millones de euros (incremento del 5,22%), mientras las recetas subieron un 5,95%, hasta alcanzar los 796 millones.