De cinco a dos reduce el Ejecutivo de José Antonio Monago el número de gerencias territoriales del Servicio Extremeño de Promoción a la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad). Manuel Granado estará al frente de este departamento en Cáceres y María Visitación Muñoz en Badajoz. Ambos fueron presentados ayer por el secretario general de Servicios a la Ciudadanía, Atención Sanitaria y Social y Familias de la Junta de Extremadura, Francisco Javier Fernández, y por la directora gerente del Sepad, María Dolores Beltrán.
Según Fernández la reducción de cargos se realiza en aras a conseguir una mayor eficiencia. "La intención es reducir altos cargos pero seguir prestando la misma atención y aumentar las prestaciones", indicó ayer. Lo cierto es que en Extremadura la implantación de la Ley de la Dependencia ronda el 57%. Según datos del Ministerio de Sanidad casi 18.000 extremeños están recibiendo la prestación a la que tienen derecho. Sin embargo, aún esperan por ella otros 13.000. Entre ellos hay más de 4.500 expedientes que aún no se han abierto por primera vez. La nueva directora gerente del SEPAD, María Dolores Beltrán, señaló que en la región viven unos 28.000 usuarios de la Ley de Dependencia. Explicó que es difícil determinar la cifra exacta porque los expedientes se encuentran en distintas fases. "Estamos estudiando la posibilidad de poner al día los datos porque son muchos los recursos que necesitamos y nos hemos encontrado con una estructura informática deficitaria", apuntó Beltrán al mismo tiempo que recordaba que se está trabajando ya en la elaboración del cálculo presupuestario que se necesita para poner al día el Sepad.
