La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, anunció ayer la firma de un convenio entre el Gobierno central y la Junta de Extremadura para fomentar la integración de los inmigrantes en la región. El acuerdo, que se rubricará los próximos días, cuenta con una dotación económica de 1,4 millones de euros, de los que 500.000 se destinarán a programas de educación, algo que consideró fundamental para la integración de este colectivo.

Rumí, que hizo estas declaraciones en la inauguración en Cáceres de las Jornadas sobre Inmigración y Trabajo organizadas por UGT, destacó que el convenio será financiado en un 70% por el Gobierno y en un 30% por la Administración regional. La secretaria de Estado incidió en que este acuerdo pone de manifiesto el compromiso adquirido por el Gobierno de Zapatero en el desarrollo de una nueva política de inmigración, a la que se le ha dado un nuevo enfoque.

El acto de inauguración de las jornadas contó también con la Delegada del Gobierno, Carmen Pereira, el alcalde de Cáceres, José María Saponi, y el secretario general de UGT en Extremadura, Miguel Bernal, quien destacó la necesidad de consolidar una política migratoria que facilite la inserción laboral de los inmigrantes que deseen asentarse en la región.

En este sentido, Bernal anunció que el sindicato desarrollará en los próximos tres años un plan de acción que posibilite la inserción laboral de los inmigrantes. Además, señaló que desde UGT se establecerán contactos con regiones de otros países encaminadas a regularizar y controlar el flujo migratorio.

Por otra parte, Rumí aprovechó su visita a Cáceres para desplazarse hasta Talayuela, el municipio extremeño con más inmigrantes. La secretaria de Estado aseguró que la localidad cacereña es "un ejemplo a seguir por todas aquellas poblaciones que tienen un número de extranjeros importante". También conoció la labor que se desarrolla en el Colegio Público Gonzalo Encabo, centro al que puso como ejemplo de integración a través de la educación.