Tanto el Gobierno como las comunidades autónomas reafirmaron ayer su rechazo a la propuesta de reforma de la Política Agraria Común presentada la pasada semana por la Comisión Europea (CE), ya que consideran que va en contra del modelo de producción español. Así lo manifestaron la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, y los consejeros del ramo al término de la Conferencia Sectorial de Agricultura y del Consejo Consultivo de Política Agrícola, celebrados ayer en Madrid. Aguilar explicó a los medios que pedirá a los eurodiputados españoles que también rechacen la reforma, porque "afectaría gravemente" y sería "un retroceso para la agricultura española".
El consejero de Agricultura de Extremadura, José Antonio Echávarri, remarcó por su parte la necesidad de consensuar propuestas concretas entre las comunidades y el Gobierno central para "cambiar lo que se pueda" del proyecto de reforma de la PAC que definió como un "fracaso" y un "peligro" para el sector. Echávarri enfatizó que todas las comunidades rechazan la propuesta inicial de la PAC y la necesidad de seguir estudiando medidas para evitar el impacto negativo que puede tener la reforma para la agricultura nacional y extremeña. El consejero reiteró su oposición a la denominada tarifa plana o a las disposiciones de la política de verdeo , dado que Extremadura cuenta con un tercio de su territorio en la Red Natura.
También criticó que el Gobierno "no haya hecho los deberes" en los últimos meses y agregó que el Gobierno resultante de las elecciones del 20-N será el encargado de negociar los intereses de España ante Bruselas y de definir alianzas con otros países para lograr una reforma favorable para los agricultores.
En esta misma línea, la consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, lamentó que el Gobierno "no haya sabido defender" los intereses del sector, "ni cambiar ni una sola coma" de los documentos de la Comisión, que se recorte del presupuesto y que se sustituyan los derechos históricos por una tarifa plana .
La titular de Agricultura de Andalucía, Clara Aguilera, hizo hincapié en que las autonomías hayan sido capaces de superar "escollos" y consensuar una posición de rechazo a la propuesta de la Comisión y defendió la necesidad de un presupuesto suficiente y cambios "más realistas", mientras que la responsable de Agricultura de la Comunidad Valenciana, Maritina Hernández, mostró su "rechazo frontal" a la propuesta porque "atenta contra el modelo productivo de nuestra agricultura" y abogó por estudiar el "impacto económico" en cada sector.
El consejero de Agricultura de Murcia, Antonio Cerdá, consideró la reforma como "ineficaz" e "inaceptable", ya que "ataca" a la producción de alimentos, introduce más burocracia y otorga una relevancia "innecesaria" al "reverdecimiento" de la PAC.
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio de Baleares, Gabriel Company, criticó la reforma porque "ni es oportuna, ni aporta nada en estos momentos", aunque la insularidad, "por primera vez en la historia", está reflejada en el documento. Canarias sí reconoció que la propuesta comunitaria es de su agrado, ya que "recoge las aspiraciones que el Gobierno insular ha realizado a Bruselas", pero aun así mostró su solidaridad con el resto de autonomías, según su consejero del ramo, Juan Ramón Hernández.
