El Grupo Gallardo Balboa ha calificado de «auténtico fracaso» el resultado de la última subasta de interrumpibilidad celebrada la semana pasada porque «daña seriamente la competitividad de esta industria en los mercados nacionales, europeos e internacionales». El grupo extremeño solo ha podido acceder a los bloques de 5 MW con un precio medio de asignación de 63.168 euros/MW y año, mientras que industrias del mismo sector y que fabrican los mismos productos han podido acceder a los bloques de 40 MW, mucho mejor incentivados, 174.174 euros/MW y año, según recoge en un comunicado de prensa. Gallardo explica que la última subasta supondrá un recorte de la retribución anual del servicio de interrumpibilidad de 209 millones de euros al año, un 40% menos que en 2017, de acuerdo a los datos de la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (AEGE). Las normas y condiciones de la última subasta, convocadas para cubrir el periodo de junio a diciembre, han hecho que se saldara a precios «muy inferiores», a pesar de la «mayor utilización» que se hace ahora de la interrumpibilidad. Un sistema por el que, recuerda este grupo, las empresas que más electricidad consumen están dispuestas a reducir o suspender su consumo energético en momentos de mayor demanda eléctrica, o para aportar una reducción puntual del coste de la electricidad.