La azucarera se podrá instalar en Mérida. Finalmente, el grupo Al Khaleej Sugar ha elegido el 'Expacio Mérida' para instalar su proyecto empresarial en Europa. Según las fuentes consultadas por El Periódico Extremadura, el próximo lunes se mantendrá un encuentro entre la Junta de Extremadura y los responsables de esta industria para firmar un acuerdo de colaboración y mostrar su voluntad a ubicarse en territorio extremeño descartando otras opciones.
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se ha limitado a señalar esta mañana a Efe que "la próxima semana hay prevista una reunión en la que espera que avancemos definitivamente en el proyecto de la azucarera en Mérida" porque todavía, ha precisado, "no está cerrado". El jefe del Ejecutivo regional se ha expresado así sobre la situación de este importante proyecto empresarial antes de inaugurar el evento 'Mérida se mueve. Networking', organizado por la Coordinadora de Empresarios de Mérida (CEM). Ha asegurado que a lo largo de los últimos meses se ha "avanzado" y se han ido superando "obstáculos", para expresar después: "yo espero que acabe siendo una realidad sin duda alguna".
Fuentes conocedoras del proyecto han avanzado, sin embargo, que los obstáculos de suministro de energía casi están solventados y la financiación del proyecto ha avanzado sobre manera dado que el grupo árabe de Dubái aporta parte del mismo, pero en otra depende de otros socios, fondos de inversión y banca comercial y de inversiones. En consecuencia, el proyecto cuenta con todos los parabienes para llevarlo a efecto si bien "no hay prisas" en el sentido de que podría tardar aún unos meses en ser efectivo. Las facilitadas administrativas desde la Junta de Extremadura han sido determinantes para fijarse en el emplazamiento de Mérida, lo mismo que su acceso al agua necesaria para el proyecto y la obtención de la energía. Cabe recordar que existía otro emplazamiento en perspectiva sitiado en Reino Unido, pero finalmente ha sido descartado.
La fábrica prevista podría contar con una capacidad de transformación de hasta los 5,4 millones de toneladas de remolacha al año para producir unas 800.000 toneladas de azúcar. Conllevaría la creación de unos 200 puestos de trabajo directos, a los que se añadirían muchos más indirectos en transporte o agricultura, ya que supondría que en la región volvieran a cultivarse decenas de miles de hectáreas de remolacha.
La promotora del proyecto es la empresaria Hassa Jamal Al-Ghurair, hija del fundador y director general de Al- Khaleej Sugar, firma propietaria de la mayor fábrica de azúcar el mundo, ubicada en el emirato árabe de Dubái y que produce cada año más de 1,5 toneladas de este producto que exporta a 48 países.
